Condena transversal de políticos locales a violencia contra migrantes, pero no hay acuerdo sobre medidas a tomar
HUMANITARIO. Mientras para algunos es necesario sobre todo reforzar el control fronterizo, otros sostienen que brindar albergues es fundamental para evitar hechos como los de Iquique.
La violenta protesta en Iquique contra los migrantes venezolanos, dio la vuelta al mundo. La quema de pertenencias, en especial el coche de un bebé lanzado a una hoguera, por un grupo de exaltados, ha sido condenada de manera transversal. El tema ha sido objeto debate en todos los programas políticos de domingo. Asimismo, el hashtag #xenofobia, junto a #Iquique, fueron los más comentados en las redes sociales, durante el fin de semana.
Como es sabido, después de Colchane, Iquique es la segunda parada de los migrantes venezolanos para continuar su ruta hasta Santiago, el destino de la gran mayoría. Antofagasta, ubicada a 416 kilómetros de Iquique, y en especial Tocopilla, a 208 kilómetros de Iquique, son las ciudades de paso, de esta caravana humana, que recorre desde el norte a sur el país. En Antofagasta, la crisis humantaria es más visible y palpable en el terminal de buses y en calles céntricas. Misma situación en Tocopilla. En consecuencia, existe preocupación entre las autoridades que la situación se desborde y detone en incidentes condenables como los acaecidos el sábado en la Región de Tarapacá.
Albergues
Para el gobernador regional, Ricardo Díaz, la crisis de migrantes en el norte se agrava por la inacción del ministerio del Interior y el gobierno. A su juicio, "ellos han recibido ayuda de organismos internacionales. Nosotros, como gobernadores, hemos hecho ver que se debe adoptar una postura humanitaria; de tal manera que podamos generar albergues para que la población migrante pueda estar con seguridad, alimentos y abrigo. Además, para ir controlando con PCR, o vacunas".
Ricardo Díaz calificó de negligente la actuación del gobierno, pues no ha iniciado los trámites de refugio para las personas que vienen escapando de una situación política compleja. "Se las ha ofrecido ayuda, como transporte seguro para que los migrantes puedan continuar su viaje, pero no lo han permitido. Por otro lado, al negarse a actuar, tampoco han permitido un debido control y trazabilidad de la situación migratoria. Por tanto, nos parece inexcusable lo que hace el gobierno de Chile, pues las medidas que anuncian no bajarán la afectación que están teniendo las ciudades del norte, y por lo mismo, les exigimos que cambien su política migratoria que han llevado hasta el momento. No puede ser que la inacción del gobierno de Chile, genere xenofobia y violencia hacia las personas que están habitando estos territorios", aseveró.
Tribunales
El diputado José Miguel Castro (Renovación Social), por su parte, dijo que, si bien comparte el sentimiento del poco control de la migración, no puede estar a favor de la violencia que se desató. "Entiendo el espíritu que llevó a esto, pero no puedo avalar la violencia. Esto hay que tomarlo multifactorialmente, por ejemplo, el gobernador de la Región de Tarapacá había conversado con el delegado presidencial, para encargarse de la parte humanitaria. Y el delegado presidencial se haría cargo de todo lo que era la seguridad pública. Después eso fue desconocido. Si no somos capaces de trabajar juntos, en torno a la migración ordenada, es muy complicado", afirmó.
Castro sostuvo que es importante hacer entender a nivel central que la migración pasará por cada una de las regiones, entonces. "Los tribunales deben entender que existe una nueva ley de migraciones, y que deben ser deportados quienes no entren con los papeles al día; quienes no entren de una forma correcta. Me preocupa mucho a futuro, lo que será la carrera presidencial, donde candidatos como Gabriel Boric, ya declararon que quieren abolir la ley de migraciones. Quieren hacer una migración más humanitaria, pero en el fondo están promoviendo una migración más descontrolada", dijo.
Respecto a la posibilidad de un campo de refugiados, Castro dijo que el país está hasta el tope de gasto, y otro más, no es necesario.
Desafíos
El concejal y sociólogo Camilo Kong (Convergencia Social), calificó de preocupante el escenario actual en el mundo, no sólo a nivel local. "Estos hechos en particular, en Iquique, son graves, preocupantes y tristes. La inmigración es un hecho inherente del ser humano, y que se ha dado por siglos. Las sociedades, a medida que se desarrollan, deben proponer legislaciones que al menos, desde el enfoque de Derechos Humanos, logren resolver o prevenir los conflictos. Así, pasa a ser un tema político en un 100%, y estos fenómenos a nivel global, tienen un impacto local que hemos comenzado a ver en Colchane, Iquique, Tocopilla, y Antofagasta", precisó.
Y agregó: "Es ahí donde tenemos desafíos como la educación; además de generar políticas públicas que se trabajen con los otros países. El sistema político que tenemos termina delegando responsabilidades a autoridades locales que se manejan desde el centro del país, en este caso. Hay que dialogar y colaborarse con los otros estados nacionales. Y, en segundo lugar, hoy, la situación en el norte es crítica. El municipio, la delegación presidencial y el gobierno regional deben tomar cartas en el asunto para prepararse de lo que puede ocurrir aquí, en cuanto otorgar condiciones dignas para las personas que estén en tránsito. Y, no actuar como se suele hacer de una manera punitiva. Como concejal pregunté por las medidas que se tomarían en el municipio, y no había nada".
"No más violencia"
Para Marcela Ruz, secretaria regional del Partido Republicano, la crisis migratoria de la frontera norte agudiza los problemas sociales que arrastra por lo que debe abordarse con mayor fiscalización. Sin embargo, afirma su rechazo a todo tipo de violencia en manifestaciones, como la quema de carpas y pertenencias de migrantes este sábado en Iquique.
"Me parece que la situación es insostenible, que personas de otros países estén violando de manera sistemática nuestras fronteras. No están respetando nuestra ley de migraciones, están entrando de manera ilegal derechamente. Esto está generando una crisis en nuestro país, donde tenemos nuestros propios problemas con gente en la línea de la pobreza, que es una situación que debemos resolver. Además, enfrentamos nuestras complicaciones por la delincuencia y narcotráfico. Por lo tanto, no podemos estar importando ni pobreza ni personas con situaciones delictivas. Si bien es cierto que hay personas que vienen arrancando de un régimen totalitario, como en el caso de Venezuela, lo que es lamentable, también lo es que se esté exponiendo a niños en la frontera, con todo lo que implica peregrinar por pasos no habilitados en el desierto y con fríos extremos", afirmó.
"Estoy de acuerdo con las manifestaciones, pero no con la equivocada definición de las manifestaciones que incluyeron quemar y destruir durante el estallido social (…) En el caso de Iquique, no estoy de acuerdo con la quema de las carpas, fue muy violento, porque son personas y no debe normalizarse ese tipo de violencia", sostuvo Ruz.