La hija de un exministro radical que llegó a ser el soporte de su marido en el poder
LUCÍA HIRIART. Una educación privilegiada y su tacto convirtieron a "Doña Lucía" en parte del régimen y líder Cema Chile, institución de gran influencia que con los años significó su propia caída tras denuncias por malversación. Esta es su historia de vida y viudez.
Una palabra que se repite en los perfiles de María Lucía Hiriart Rodríguez, viuda de Augusto Pinochet, es "controvertida": una mujer nacida en la élite, con un padre exministro del Interior, casada con un militar de rango medio, contrariando a su familia; que pese a esto avanzan los años y el futuro líder del régimen no destaca, mientras que ella desea ir más allá. Por esta razón, numerosos libros citan a Hiriart como "instigadora" del 11 de septiembre, ataque contra La Moneda que mostró cómo se llevaba la pareja con el poder, la avanzada femenina creada por ella y luego la caída, demandas por fraude y la soledad que culminó ayer.
"Doña Lucía", como fue conocida en los círculos del mundo militar, nació en Antofagasta el 10 de diciembre de 1922, motivo por el que hace menos de una semana celebró sus 99 años en compañía de su familia, tras frecuentes internaciones en el Hospital Militar durante los últimos años.
No obstante, una de las últimas fotos conocidas de Hiriart fue en la misma celebración, pero del año 2020, compartida a través de redes sociales y donde se ve a la exprimera dama sonriente por sus 98 años, de traje y con su clásico collar de perlas (ícono de estilo replicado de la exprimera ministra Margaret Thatcher, cercana a Pinochet), aunque conectada a una sonda.
Su ánimo indeclinable, citan casi todos los libros y entrevistas dados por cercanos a los Pinochet Hiriart, convirtió a la hija del exministro del Interior y miembro del PR, Osvaldo Hiriart, junto a María Lucía Rodríguez Auda, en una de las mujeres más influyentes de la política chilena contemporánea, ya que, se decía en los pasillos de La Moneda, el general escucharía a su esposa por sobre todas las voces en los años del régimen, entre 1973 y 1990.
Lucía conoció a Pinochet en 1941, cuando ella tenía 16 años, él, 23; y se casaron en 1943, pese a los rumores de oposición por parte de la familia de ella, quienes consideraban que un militar no correspondía al carácter y las necesidades de su hija mayor. Sin embargo, a la ceremonia asistió el ex Presidente Juan Antonio Ríos.
El matrimonio tuvo cinco hijos: Inés (exconcejala de Vitacura), Augusto (exmilitar acusado de corrupción, compra y venta de vehículos robados y tenencia ilegal de armas), María Verónica (exesposa del mayor accionista de SQM, Julio Ponce Lerou, procesado por financiamiento ilegal de la política), Marco Antonio (el hijo más apegado a su madre) y Jacqueline Marie (la favorita del padre).
La joven esposa conoció pronto el presupuesto de una familia militar, que le impedía vivir con la holgura de su infancia y adolescencia, sinsabor que se sumó a las infidelidades de su marido, quien a fines de los años 50 se enamoró de la pianista ecuatoriana Piedad Noé, mujer liberal y separada que conoció en una misión en Quito, pese a que la familia completa estaba allá.
"tomar una decisión"
El matrimonio, pese a la tormenta, sobrevivió. Y, según escribió Pinochet en "Camino recorrido, memorias de un soldado", una noche "mi mujer me llevó a la habitación donde dormían mis nietos y me dijo: 'Ellos serán esclavos porque no has sido capaz de tomar una decisión'".
Aquel momento fue la víspera del 11 de septiembre de 1973, cuando el comandante en jefe del Ejército permaneció hasta la noche con el Presidente Salvador Allende, quien lo nombró en el cargo solo 19 días antes y, pese a las advertencias de miembros del mundo político, no dudó de la lealtad del militar.
El padre de Lucía, según diversas investigaciones, en privado se habría mostrado contrario al régimen liderado por su yerno. Sin embargo, la cuidada educación que Osvaldo Hiriart procuró para su hija fue la que conduciría a Pinochet a través del poder, ya que ella contaba con movimientos mucho más finos y calculados, los que orientaron al general.
Los uniformados de la Junta coinciden, de acuerdo a testimonios de época, que Hiriart era quien tenía la última palabra en las consultas de su marido, y una discrepancia con ella podía significar problemas.
Cema chile
La entonces primera dama no limitó su cargo a consejera de su marido, sino que construyó su propia red de influencias a través de Cema Chile, institución dedicada a la mujer creada por el general Carlos Ibáñez del Campo, pero cuyo principal recuerdo es la gestión de Hiriart, quien solo abandonó su rol en 2016, al ser denunciada por malversación de fondos estatales a través de la entidad.
Cema era una red de centros de madres donde mujeres pobres eran instruidas en aspectos como salud, crianza, educación y costura, clases realizadas por esposas de generales, con lo cual Hiriart aseguraba que los mensajes del régimen penetraran en el mundo rural y la periferia.
Las dudas sobre las finanzas de Cema, cuál fue el destino del dinero recaudado por la venta de los productos confeccionados por las beneficiarias, llevaron a una investigación por propiedades de la entidad avaluadas en más de $4.500 millones, hecho que condujo al cierre de la misma este año.
Otro proceso de la misma índole que debió enfrentar Hiriart fue el Caso Riggs, donde se calculó en $8.100 millones el perjuicio impositivo de las maniobras financieras de Pinochet para ocultar su fortuna en diversas cuentas en el extranjero, quien fue sobreseído tras su muerte en 2006. Esposa e hijos también más tarde fueron sobreseídos.
Otoño
Los días más difíciles de "Doña Lucía" comenzaron en octubre de 1998, cuando Pinochet, tras someterse a una operación, fue detenido en la London Clinic, producto de la petición de arresto emitida por el juez español Baltasar Garzón, con fines de extradición por crímenes de lesa humanidad.
Thatcher, entonces, visitó al general durante su arresto domiciliario en Virginia Water, ya que la exprimera ministra lo observaba desde Gran Bretaña cuando asumió el mandato, en 1979; y luego obtuvo el respaldo chileno en 1982, en el conflicto por las Islas Malvinas, con Argentina.
En 2013, falleció la expremier británica e Hiriart envió un mensaje al entonces Primer ministro, David Cameron: "Nunca olvidaré su visita histórica el 26 de marzo de 1999 a Virginia Water. Ese sigue siendo el único momento luminoso en el recuerdo de aquellos días oscuros que pasamos en Wentworth, esperando poder regresar a Chile".
Hiriart en 2014 compró el departamento de La Dehesa -una de las zonas más exclusivas de Santiago-, donde permaneció hasta ayer, tras, con cada acusación y el deceso de su marido, ser despojada de cocineros, escoltas y choferes, aunque no de su seguro de salud en el Hospital Militar, lugar donde fue internada en numerosas ocasiones durante los últimos años.