Finalizando el segundo año en pandemia por el Covid-19, y con un proceso de vacunación que ya incluye dosis de refuerzo, el efecto de la campaña de inmunización masiva se ve reflejado en las cifras de fallecimientos confirmados por coronavirus.

Y si bien durante este año se contabilizan más decesos que el año anterior -690 en 2021, frente a 594 durante el año anterior-, desde junio a la fecha se observa una caída sostenida en los muertos a causa del Covid-19, según se desprende de los datos disponibles en el DEIS.

Por dar un ejemplo, febrero y marzo fueron los meses del 2021 más cruentos del segundo año de la crisis sanitaria, con 114 y 103 muertos por Covid-19, respectivamente. Estos fueron los dos últimos periodos en donde se superó la barrera de los cien fallecidos en un solo mes. De ahí en adelante, el indicador comenzó un lento pero continuo descenso. (Ver gráfico).

La disminución entre estos dos años de pandemia se puede observar al comparar los meses de junio y julio, en donde durante el 2020 se registraron más fallecidos a causa del virus, con 158 y 167 decesos respectivamente. Mientras que durante junio del 2021 hubo 84 fallecimientos y en julio 62.

Ya desde septiembre el indicador de fallecimientos confirmados por covid-19 no superó la barrera de los 20, con octubre siendo el mes con menos decesos notificados en este año, con un total de 8 decesos.

En tanto, durante noviembre se reportaron 15 fallecidos en total, y en diciembre se contabilizan 12 víctimas fatales a la fecha.

Evitar brotes

Pese al buen resultado que muestra el proceso de inmunización masiva, con dosis que tenían como objetivo principal reducir los cuadros graves o muertes al contagiarse con covid-19, los especialistas consultados recalcan que no se debe bajar la guardia.

Para el doctor Pedro Usedo, jefe de la Unidad de Infectología del Hospital Regional, este 2021 "absolutamente no tiene nada que ver con el 2020", y argumenta la principal razón es "que la población está vacunada. Eso marcó un antes y un después en la pandemia. Afortunadamente Chile, en ese sentido, hizo una buena labor, una tremenda medida de tratar de que el país tuviera las dosis necesarias y empezar a inocular tan pronto tuvimos la vacuna con las dos primeras dosis y actualmente tratando de lograr la mayor cobertura con el refuerzo. Eso claramente marcó un antes y un después en la mortalidad de los pacientes".

Asimismo, agrega que "como es bien sabido, el covid-19 durante el 2020 era nuevo para nosotros. Los manejos terapéuticos eran bastante distintos a lo que hoy hacemos. No había vacunas, ni mayores antecedentes. Por lo tanto, obviamente, la enfermedad generó su curso natural y eso de la mano a una mortalidad aumentada en comparación al 2021".

"Si bien es cierto todavía no logramos tener una cabal comprensión respecto al virus en términos generales, sí sabemos que tiene un comportamiento un poco más predecible, se ha facilitado el manejo. Eso, de la mano de la vacunación, ha mejorado notablemente la mortalidad de los pacientes", profundiza Usedo.

Aun así, Usedo recalca que "no hay que leer mal el mensaje. Cuando uno dice que tenemos menos casos y menos muertes, es estupendo. Pero obviamente está dado porque se conjugan todos estos factores: la vacunación, la adherencia a las medidas, mejor trazabilidad y políticas públicas, mejores oportunidades de métodos de diagnóstico. Cuando esto se conjuga, el resultado final es menos casos y muertes. Pero si uno baja la guardia en cualquiera de estos puntos, obviamente ocurrirá lo que está pasando en el mundo, aumentos de contagios. Y más que por las variantes, se da porque se relajan las medidas de autocuidado", manifiesta.

La doctora Paula Margozzini, epidemióloga y académica del Departamento de Salud Pública de la U. Católica, menciona que "tanto los informes de mortalidad de DEIS como los informes de Minsal, sobre hospitalización y fallecidos en población vacunada y no vacunada, muestran que la vacunación atenúa significativamente la gravedad de la enfermedad".

Aún con lo anterior, recalca que se debe "tratar de evitar los brotes de gran volumen de casos, ya que con cada alza se generará inevitablemente un pequeño porcentaje de personas que se hospitalizará o fallecerá".

Y agrega que "si el brote es grande, el número de hospitalizados puede tensionar nuevamente las UCI y afectar la recuperación de prestaciones postergadas para problemas no Covid", y manifiesta que se debe mantener las medidas de autocuidado: "El mensaje es usar mascarillas, testearse rápido ante síntomas y vacunarse con todas las dosis y refuerzos que indique la autoridad sanitaria".

Un total de 31 casos nuevos de covid-19 registró la Región de Antofagasta, según reportó el Ministerio de Salud (Minsal) en su balance diario.

De ellos, 22 presentaron síntomas, siete fueron asintomáticos y dos estaban sin notificar. Asimismo, nuevamente se informó el resultado de menos de mil exámenes PCR, con un total de 508 y una positividad que aumentó a un 4%.

Con esto, la región llegó a los 66.771 contagios por el coronavirus desde el año pasado, cuando comenzó la crisis sanitaria.

Además, la cartera sanitaria informó 304 casos activos en la zona hasta ayer. Mientras que no se comunicaron nuevos fallecidos, manteniendo la cifra de 1.285 de decesos a causa del covid-19 desde el 2020.

La ocupación de camas UCI en la red asistencial de la zona se encontraba en un 92% hasta la jornada de ayer, según comunicaron desde la Delegación Presidencial Regional, con 15 pacientes internados en camas críticas, los cuales la totalidad se encontraba conectados a un ventilador mecánico.