San Gregorio: la otra tragedia suscitada por la crisis del salitre
MEMORIA. A 101 años del violento hecho acontecido en la región, esta oscura página de la historia regional se une al cúmulo de represiones obreras de inicios del siglo XX.
Hace 101 años, alrededor de 50 obreros del salitre (no se cuentan datos precisos) perdieron la vida en un altercado perpetrado en la oficina salitrera San Gregorio, ubicada al interior del entonces conocido cantón de Aguas Blancas, al suroriente de Antofagasta.
Para tener un contexto, a inicios de la década del '20, Chile vivía una álgida crisis económica debido al bajo precio del salitre. Esto, porque tras el fin de la I Guerra Mundial (1914-1918) Alemania obtuvo un sucedáneo del mineral, cuyo costo de producción al ser más económico, hizo caer el valor del oro blanco.
Se iniciaron una serie de revueltas obreras en el norte del país a raíz que muchas salitreras comenzaron a quebrar, otras redujeron a su personal y aquellas que mantuvieron a sus obreros les bajaron considerablemente los salarios. A ello se agrega que previo a esta crisis, los sueldos ya eran bajos y las condiciones de vida del obrero pampino eran bastante deficitarias.
Agitaciones
Ante este escenario, dirigentes sindicales como Luis Emilio Recabarren, visitaban distintas oficinas para recoger el descontento de los trabajadores, advirtiéndoles de no abandonar las oficinas mientras al obrero despedido no se le cancelara el desahucio.
En este contexto, varios trabajadores de la oficina San Gregorio (que agrupaba un total de 715 habitantes entre hombres y mujeres) fueron despedidos en enero de 1921 por la inconsistencia económica de la empresa (Gibbs), que la sostenía. Los obreros ya advertidos del pago del desahucio, se negaron a abandonar el pueblo mientras no se le cancelase el dinero.
Por ello se iniciaron una serie de conversaciones entre obreros, dirigentes, administrador de la salitrera y empresarios. El tira y afloja no satisfizo a ninguna de las partes y el punto de ebullición llegó el 3 y 4 de febrero de ese año, cuando llegó a la zona un destacamentos del ejército.
Tragedia
Según el extinto historiador antofagastino Floreal Recabarren "La firma Gibbs, como otras, se negó a, satisfacer la petición de sus trabajadores y lo que es peor, con irresponsable actitud, dejó al administrador Daniel Jones sin poder de decisión. Mientras tanto, en los mismos instantes que comenzaba el enfrentamiento entre soldados y obreros, Alejandro Fray Douglas, gerente y representante de la Empresa Gibbs, miraba las alternativas del conflicto oculto en la Oficina Valparaíso, a cuatro Kilómetros y medio de San Gregorio, y en lugar de tomar medidas para resolver la situación, le fue más fácil coger el teléfono para informar al Intendente de la Provincia que la violencia había estallado".
Asimismo crónicas de la época dan cuenta que en San Gregorio no se generó una masacre a mansalva contra obreros inermes como sí ocurrió en Antofagasta en 1906 o Iquique en 1907, sino que los trabajadores a sabiendas de estas anteriores masacres, respondieron con cartuchos de dinamita al personal de tropa.
Esto se generó también porque algunos de los obreros presentes eran excombatientes de la Guerra del Pacífico, motivo por el cual desplegaron tácticas de combate y protección para enfrentar a los militares que se presentaban en la oficina.
Motivo de lo anterior se generó prácticamente una batalla campal que terminó con decenas de obreros (y algunos militares) muertos y con sus dirigentes fusilados. Algunos heridos fueron rematados en el piso por los soldados, dando así lugar a la macabra frase del "palomeo", dado a que los agónicos que eran "repasados" vestían de blanco, clásico uniforme pampino cuyo color mitigaba la intensidad de los rayos UV.
Al respecto el investigador pampino y ganador de la Linterna de Papel por su contribución a la cultura local, Christian Venegas, dijo que "la masacre de la oficina San Gregorio, es un triste episodio que permanece en la memoria de las comunidades pampinas que históricamente han luchado por mantener viva su identidad. Representa para muchos una parte oscura de hechos que uno desearía que jamás ocurrieran y que se dio bajo el contexto de una profunda crisis económica que azotó el norte y que provocó que muchos obreros pampinos perdieran sus fuentes laborales. Lamentablemente no fue un un hecho aislado ya que se suma a otros episodios tristes como la masacre de la escuela Santa María, la matanza de la Plaza Colón, la masacre de la oficina La Coruña, entre otras y que enlutaron a muchas familias pampinas que deseaban mejores condiciones de vida. Hoy en día es una historia de la cual debemos aprender mucho, con la finalidad de poder construir una sociedad más justa e igualitaria".
La tragedia se ejecutó durante la primera administración del presidente Arturo Alessandri Palma, paradójicamente quien prometió al pueblo una sociedad igualitaria en donde su "querida chusma" tendría el protagonismo.
Por ello, Alessandri pasó a la historia como el primer presidente populista de Chile y a la oficina San Gregorio se le cambió el nombre a "Renacer" para tratar de ocultar su aciago pasado.
"La masacre de la oficina San Gregorio, es un triste episodio que permanece en la memoria de las comunidades pampinas que históricamente han luchado por mantener viva su identidad".
Christian Venegas, Investigador pampino