A la muerte de José Papic
En esta ciudad de memoria tan débil y escasa, debemos destacar a los grandes hombres que, en épocas anteriores, lucharon por dar bienestar, porvenir, futuro y esperanza a nuestra ciudad, plantando la semilla de Antofagastinidad, defendiendo nuestros derechos y consiguiendo leyes y beneficios que, lamentablemente, se perdieron. Hoy, que han pasado 39 años desde la muerte del querido Don Pepe, como le llamaba la gente, le rendimos homenaje.
José Papic Radnic nació en Antofagasta, el 14de marzo de 1909.
Leemos desde la pluma de Andrés Sabella:
"Pepe Papic luchó por nuestra ciudad, la suya, en derecho de conciencia y corazón, alentando prosperidades, seguro que era la única y honrada manera de construirla en futuro sólido."
Don Pepe fue Regidor de la Municipalidad de Antofagasta, en dos períodos, entre los años 1935 y 1941.
Andrés Sabella dice:
"En su estampa alta de hombre y de alto caballero, parecía levantarse el porvenir. Esta palabra profunda y misteriosa, porvenir, no fue para él uno cualquiera: fue el porvenir feliz de su Antofagasta"
Toda su actividad pública estuvo centrada en su máximo objetivo: el Progreso de Antofagasta, destacándose como Presidente del Centro para el Progreso de Antofagasta. Así obtuvo la Ley de Frontera Libre Alimenticia y la Ley del Cobre, que proporcionó durante muchos años cuantiosos recursos que permitieron la realización de todas las obras públicas del Norte, como la Carretera Panamericana y otras de gran envergadura.
Andrés Sabella dice:
"En instantes de amarga memoria, cuando la luz eléctrica lloraba en su pobreza, cuando el agua potable nos mordía en su ausencia, cuando el Centro para el Progreso latía en fuego, cuando el Comando de Frontera Libre Alimenticia era clamada en todos los hogares antofagastinos, Papic encabezaba protestas y desfiles, colocando su dinero para lograr estos anhelos"
José Papic Radnic, quien entregó sus mejores energías a la causa del Norte y muy especialmente de Antofagasta, luchando sin tregua contra el centralismo, falleció el 18 de febrero de 1983.
Sabella dice:
"Con la muerte de José Papic Radnic muere, en cierta medida, casi toda la fe en Antofagasta, muere la esperanza de saberlo un puerto en plenitud. Decimos, así, porque Papic vivió para ser, sin fatigas ni desalientos, el verdadero impulsor de cuanto bien pudo acrecentarnos".
María Canihuante, desde textos de Andrés Sabella.