"Pensar que algo se consiguió porque se pone en la Constitución, es un error"
La académica sostiene que la Convención debe centrarse en estos últimos tres meses en las demandas de octubre de 2019 y que, si gana el rechazo, igual habrá que hacer modificaciones en la Constitución. También cree que uno de los mayores impactos estará en el cambio a un Estado regional.
Todas las encuestas reveladas durante la última semana han proyectado un resultado estrecho entre el apruebo y el rechazo, con un alto crecimiento en esta última opción, para el plebiscito que definirá el futuro de la nueva Constitución. Aunque el proyecto de Carta Magna ni siquiera tiene un capítulo terminado, su discusión ha generado suspicacias en la ciudadanía.
La decana de la facultad de Derecho de la Universidad Adolfo Ibáñez, Isabel Anitat, comenta que esta "fotografía de la realidad", que son los sondeos de opinión, es un llamado de atención a la Convención Constitucional para que aproveche mejor el poco tiempo que le queda hasta el 5 de julio para focalizarse en las cosas centrales del texto, claramente identificadas durante el estallido social de octubre de 2019, indica.
-¿Cómo evalúa el trabajo de la Convención Constitucional hasta ahora?
-Luego del tiempo dedicado a los reglamentos, hubo un período, que fue entre octubre y enero, en que se dedicaron mucho a las salidas territoriales, a las audiencias ciudadanas, a la presentación de iniciativas populares, pero se pospuso la discusión propiamente en las comisiones y el pleno. Eso ha generado que ahora veamos mucha agilidad en el debate, en las propias comisiones y esta es una sensación de urgencia que no estuvo tan presente antes. Entonces, ahora vemos un frenesí de votaciones y con pocos meses por delante.
-Hay dos cosas que están presionando ahora a la Convención: por un lado, el tiempo que se acorta y, por otro, la gran cantidad de temas por discutir.
-Es el costo de la fragmentación, en el sentido de que la Convención tiene una composición muy fragmentada, no sólo por la cantidad de colectivos, sino que también porque al interior de esos mismos muchas veces no hay acuerdos o decisiones uniformes y vemos colectivos que se tienden a disgregar y que incluso votan diferente ante una norma específica. Eso hace que muchas veces la discusión que se está dando en una Comisión se replique en otras con miradas específicas