"Ser jugador profesional siempre fue mi sueño y gracias al club lo pude lograr"
Fueron casi 17 años los que Cristián "Chapa" Rojas, alcanzó a estar en Club Deportes Antofagasta. Durante ese tiempo, logró ser parte de las campañas más exitosas del club (tras el retorno de este a Primera División en 2011), siendo parte fundamental de esquemas como el de Beñat San José, Nicolás Larcamón y Gerardo Ameli, tras su regreso al club en 2013.
En entrevista con El Mercurio de Antofagasta, el histórico capitán "Puma", relató sus emociones por dejar al club que lo vio crecer, además de dejar entrever algunos proyectos que podrían tenerlo vinculado al fútbol.
¿Qué sentimientos abriga por el CDA, tras casi 17 años de compromiso con el club?
-De agradecimiento. De un sincero agradecimiento por haberme dado la oportunidad de haber empezado a crecer en un mundo con el que soñaba de niño, ser jugador profesional era mi sueño, siempre lo fue y gracias al club lo pude lograr.
¿Se va satisfecho con lo realizado?
-Uno siempre queda con deudas. Parte de mi sueño de ser futbolista era levantar una copa; si lo miramos desde ese punto de vista, es un trabajo incompleto, pero por otro, cuando se cierra un ciclo, lo más importante es lo que queda al final del camino, y en ese contexto me he encontrado con muchas muestras de cariño por parte de la gente. Me mandan muchos mensajes, me llaman, están pendientes de mis redes sociales, y por todo ese cariño demostrado, yo me siento pagado.
¿En qué momento toma la decisión de retirarse?
-Hace dos años atrás. Cuando renové contrato, siempre supe que estaba renovando mi último contrato. Siempre proyecté que iba a jugar hasta los 36 a 37 años, edad que tengo, y también porque soy prudente de los procesos. El fútbol es un deporte que cada día se va renovando. Los jugadores más jóvenes te van pidiendo espacio, y en ese sentido, llegado el momento, uno tiene el deber de salir y cerrar el ciclo, por el bien de la continuidad deportiva de los más jóvenes. Obviamente imagine mi retiro de otra manera, estando dentro, pero el momento llegó en estas condiciones y como siempre digo, porque soy muy hincha, lo más importante son los colores.
¿Qué hará ahora? ¿Piensa seguir vinculado al club, de alguna manera?
-Tenemos una conversación pendiente con el presidente del club, Jorge Sánchez, y recién ahí voy a proyectar un poco lo que viene para adelante. Siempre he tratado de aportar en lo deportivo. De hecho tengo un emprendimiento, que si bien no es fútbol, mi conexión directa siempre es con el fútbol. Me encantaría poder seguir ligado al club. Sé que la visión que tiene hoy la comunidad hacia el club, está un poco caída y creo que se puede aportar mucho en ese aspecto.
Cda
¿Cómo ha sido este último año en el club?
-Obviamente este no ha sido un torneo sencillo para Club Deportes Antofagasta, se generaron muchas expectativas, pero siempre hubo dificultades para empezar bien, se generaron muchos cambios, lo que pasó con la cancha principal del estadio, que no estaba ni para entrenar ni para los partidos de local, situación que condicionó mucho la salida de Tolisano. Después a Reveco le toca asumir un club con la dificultad de pelear en la zona baja, aun así, se mostró un buen fútbol al término de la Copa Sudamericana, con el 2-0 frente a Defensa y Justicia
¿Cómo fue pasar por todas estas complicaciones?
-Fue incómodo, sobre todo cuando teníamos la localía y teníamos que viajar 4 a cinco horas para poder jugar. Nunca me ha gustado poner excusas, decir por culpa de esto tuvimos un mal comienzo. Creo que las cosas tuvieron que pasar así, no obstante lo importante hoy estar juntos, mentalizados en sacar a la institución del momento incómodo en el que está y para eso tienen que trabajar todos.
¿Cuál cree usted, fueron la razones principales de que hoy el CDA esté peleando el descenso?
-Creo que se conjugaron varias cosas. En lo que nos toca como jugadores, creo que hay que hacer una autocrítica, ya que independiente de las cosas que puedan pasar afuera, cuando uno entra en la cancha, se tiene que olvidar de todas esas cosas. Hay responsabilidades tanto externa como internamente. Tenemos que hacer un mea culpa y decir que quizás los rendimientos no estuvieron a la altura que se nos pedía.
Es compleja la situación, pero también hemos estado en peores situaciones y la forma de darlo vuelta, es trabajando en conjunto, pero estoy tranquilo. Sé la capacidad humana y profesional que tiene el camarín y que eventualmente lo van a dar vuelta.
En ese sentido, ¿cuál es tu impresión del nuevo DT de Deportes Antofagasta, el argentino Javier Torrente?
-Mi impresión vale poco, en el sentido de que la decisión ya está tomada, y la única opción que tenemos hoy para salir del fondo, es Javier Torrente y lo que queda es trabajar en torno a Javier Torrente. La hinchada también debe entender que hoy estamos en una situación complicada y que por lo mismo más que nunca se necesita alentar el doble. Para que los muchachos logren sacar esta tarea compleja que tienen, difícil pero no imposible.
¿Con cuál de los siguientes nombres de técnicos te quedas: Vergara, San José, Larcamón, Amelí, Azconzábal, Tapia, Almandoz o Tolisano? ¿ por qué?
-Aquí me van a pegar hartos mensajes, pero hay varios con quien me quedo. Sé que voy a dejar a varios fuera, pero no puedo dejar de nombrar a mi padre futbolístico que es Mario Páez, a quien tengo un tremendo respeto, pero para mí quién ha capturado todos esos conceptos, fue Beñat San José, porque es un técnico que desde lo humano, que es un aspecto que siempre he cuidado, era extraordinario, que llegó a revolucionar diría yo, con una ideología europea, española. Que generó un cambio que en ese momento no fue bien entendido, pero nos demostró que esa metodología funcionaba. Pocas veces me pasó en mi vida deportiva, el entrar a la cancha sabiendo que íbamos a ganar.
¿Qué lo hace tan especial?
-Para mí, los técnicos, más allá de la metodología misma, que te puede gustar o no, deben saber manejar los camarines. Creo que ese es un factor fundamental, el cómo se manejan los egos y el egoísmo que existe. El futbolista es un deportista muy egoísta, pero cuando llegó Beñat, administró muy bien todos esos aspectos. Dentro del camarín pasan cosas y hay que ocuparse, atenderlas. Son 32 tipos con visiones diferentes, y todos ellos quieren jugar y piensan que son el mejor en sus respectivas posiciones, y entran 11, 8 a la banca y nada más. Para mí, la construcción humana que realiza el técnico, lo dice todo.
Interinato
A Diego Reveco, siempre le ha tocado asumir el club en momentos complicados, retomar proyectos a medias o asumir el desafío de pelear el descenso, ¿Cree que merecía ser oficializado como técnico, más allá de asumir el interinato?
-No es fácil cuando te toca asumir un desafío con las situaciones que se le presentaron y tuvo que asumir Diego, pero aún así le sacó rendimiento al equipo, y sí, no es fácil tomar estos fierros calientes, porque hay muchas cosas, como el tener que jugar con jugadores a quienes tú no elegiste, parte de otra idea futbolística, sin embargo, Diego ha tenido buenas respuestas en estos procesos. Aún hay que apoyarlo, seguir perfeccionándolo, pero va por buen camino.