Amelia Carvallo
Disponible en plataformas digitales, la nueva canción de Fernando Ubiergo "Farah" forma parte de "2037", nombre hasta el momento de su nuevo disco previsto para fin de año o comienzos del próximo, cuando el músico cumpla "70 vueltas al sol", como él mismo precisa.
Al sur del balneario de Santo Domingo, en la Región de Valparaíso, dice vivir Ubiergo, quien también cuenta que nació en Valparaíso, en el barrio El Almendral, y que tiene un cariño especial por el puerto, el lugar donde sus jóvenes padres se enamoraron y, contra viento y marea, formaron con el pequeño Fernando un hogar que batalló los primeros años en Santiago.
"Mis papás me encargaron cuando eran muy chiquillos, tanto así que las familias estaban medio disgustadas. Cuando me los imagino veinteañeros, con una maleta y una guagua en brazos llegando a la Estación Mapocho me emociona mucho. Con el tiempo se abuenaron las cosas pero vivieron días complejos", recordó el músico.
Sobre "Farah", la canción que acaba de estrenar, Ubiergo dijo que tiene al mar presente, un denominador común de sus líricas. En "Farah" es el Mediterráneo. "El niño está inspirado en esta imagen que nos impactó a todos, de esta guaguita siria tirada en una playa, boca abajo, ahogada", en 2015, debido a la crisis migratoria.
"El tema de los refugiados es a nivel planetario y quería abordarlo desde lo particular, porque las cifras y las estadísticas no dicen nada. Si conocemos la historia y el rostro de alguien como que conectamos", agregó el artista.
-¿Dices unas frases en árabe?
-Sí, Esteban González, que es el cellista de mi grupo, estudia árabe y me ayudó a formar una oración que es un ruego, una imploración a Dios que hace la madre de este niño.
Y también exploraste sonidos árabes con la música.
-Sí. La canción está grabada con lo que llamamos afinación abierta, que es cambiar la afinación de la primera y sexta cuerda de la guitarra. También incorporamos la guitarra portuguesa que es de origen árabe, una especie de primo lejano del laúd que tiene un sonido agudo que nos transporta. Han sido sonoridades completamente inéditas dentro de lo que hago.
La banda
El también autor de "Cuando agosto era 21" dijo que lo acompaña desde hace tiempo un conjunto de músicos, quienes "son chicos muy jóvenes, el arreglo es de mi hijo menor Pablo, él está en el piano, Esteban en el cello, Jorge Prado en la guitarra portuguesa y Aldo que hace las percusiones".
¿Por qué se llama "2037" este nuevo disco?
-La primera vez que esa cifra se me apareció fue escrita en los bordes de unos cuadernos viejos. Después lo vi adentro de unas frases y se me ha convertido en un pequeño misterio el porqué lo tomé. Hay algo que tengo que descifrar y las canciones me lo están diciendo, ni siquiera sé si será el nombre de una canción, ahora estoy trabajando en las últimas tres.
"Escribo desde el asombro que me provoca la vida. Cuando tenía 13 años miraba el cielo de noche y sentía el pecho hinchado, con un vacío enorme, mucha melancolía, como si una parte mía estuviera repartida por todos estos lugares. Quería entender, saber si había alguien allá afuera en el universo y me decepcionaba mucho entender que las distancias eran tan grandes que no alcanzaba con una vida para hacer ese viaje. Probablemente era un pensamiento demasiado pesado para un chiquillo. A veces mi mamá salía a buscarme y no quería entrar porque tenía los ojos mojados y no podía explicarle todas estas cosas de mi corazón. Ese asombro lo mantengo y mis canciones tratan de dar un poco de testimonio sobre eso. Estamos viviendo una época de cambios tan profundos y globales, creo que ni siquiera alcanzamos a comprender", reflexionó Ubiergo.
El cantautor luego adelantó que hay una canción que se llama "Vahié", la más breve del disco, ya que "es muy minimalista, a pura guitarra y dura como un minuto. Es como una explosión de belleza, es una canción dedicada a un colibrí", señaló el músico que además se presentará el 22 de octubre en el Teatro Municipal de Concepción.
-¿Cómo es trabajar con el hijo?
-Ha sido un regalo de la vida. Pablo entró como pianista suplente hace unos seis o siete años, luego en el concierto que hicimos en el Teatro de la Universidad de Chile asumió la titularidad. La relación que tenemos en el escenario es de músicos. Siento una profunda admiración por él, es compositor y espero su primer disco.
Ubiergo también es padre de Candela, diseñadora que vive en España, y de Ohian, guitarrista y trompetista.