Don Antonio Rendic
El 13 de febrero de 1993, una compungida sociedad antofagastina se informaba del deceso del Dr. Don Antonio Rendic Ivanovic. Parte importante de la ciudadanía, especialmente los adultos mayores, vivieron momentos de tristeza con sus recuerdos para El Médico de los Pobres. El duelo se sentía en su ciudad que siempre lo apreció como Un Hombre Bueno.
Con el paso de los años, esos y otros recuerdos de este ciudadano ejemplar, adquirieron una pátina que les confirió nuevos valores. Con emoción, a la memoria viene esa magnífica "Carta del Párroco de Sutivan, Croacia", enviada el 29 de Noviembre de 1996. Todo ese pueblo estaba feliz, consta en las palabras del párraco, Padre Vicko Jelincic que firma el documento mencionado. Uno de sus hijos, que se radicó en Antofagasta por más de 90 años, había sido propuesto para que alcanzara el honor de estar en los altares. La iniciativa de nuestro Arzobispo Don Patricio Infante, para llevar al doctor Rendic al alto honor de la santidad, alegraba por igual a pueblos tan lejanos como Sutivan y Antofagasta. La iniciativa aún está pendiente. Con fe, esperamos que se resuelva.
Cuando mediaba el año 1992, según mis recuerdos, nos reuníamos en su casa y en amable conversación nos referíamos a una serie de libros de sus años juveniles. Con ellos se estructuró el volumen "LA MÚSICA DEL SILENCIO" que fue generosamente comentado por Sergio Gaytán. De ese volumen que Don Antonio calificó como el último título de su Obra Literaria, tomamos el soneto "Súplica", escrito hace 80 años:
De la PAMPA en un rincón y en blando surco modesto, echadme a dormir tan prestono lata mi corazón. Mas, dejadme a pleno sol y cuidad que hasta ese suelo,la noche baje del cielo de algún astro el resplandor.
De algún astro… uno cualquiera,cuya suave luz primerainunde mi soledad.
Y después… venga el olvido y aúlle junto a mi oído por toda la eternidad.
Hoy y siempre nos acompaña el recuerdo de Don Antonio Rendic. Su paso entre nosotros y la totalidad de sus acciones en favor de su prójimo, valen como ejemplo para una vida en comunidad en un Antofagasta cada día mejor.
Osvaldo Maya Cortés. Santiago, 19 de enero,2023