Documentales de Maite Alberdi y Sean Penn dieron que hablar en la Berlinale
BERLÍN. La chilena presentó "La Memoria Infinita" y el actor su filme, al filo de la propaganda, del inicio de la invasión a Ucrania.
Agencias/Redacción
La jornada sabatina de la Berlinale ha sido una de las más comentadas del certamen de este año y "La Memoria Infinita", trabajo de la chilena Maite Alberdi, está entre las producciones responsables de lo que ocurrió ayer.
Antes del documental nacional estuvo la película "Manodrome", con Adrien Brody y Jesse Eisenberg como elemento mediático principal sobre la alfombra roja del festival, en una jornada en que el cine chino comenzó envolviendo a la Berlinale en un manicomio de masculinidades tóxicas.
Después fue el turno del actor y director estadounidense Sean Penn, quien tuvo que defender su "Superpower" como un filme muy personal, que documenta el inicio de la invasión de Ucrania por Rusia, pero que acaba situándose al límite de la propaganda.
"Nuestro compromiso es con la verdad, con el espíritu de lucha de los ucranianos que arriesgan su vida, con la defensa de la libertad", afirmó el cineasta ante los medios ante reiteradas preguntas acerca del aspecto partidista de su filme.
"No sé si eso es o no propaganda. Es nuestra película", refrendó por su parte el codirector Aaron Kaufmann, quien como Penn vivió desde Kiev las semanas precedentes al inicio de la invasión y también el día en que se materializó la agresión rusa, el 24 de febrero de 2022.
Para Penn, como para Kaufmann, el presidente Volodimir Zelenski, como su entorno, son "nuestros amigos"; cada uno de los encuentros y entrevistas con el líder o sus directos colaboradores se producen entre abrazos, apretones de manos y el saludo "Slava Ukriani".
"No tengo la menor intención de hablar con (Vladimir) Putin. No es el momento", admitió Penn, ante reiteradas preguntas -algunas de ellas, formuladas por representantes de medios identificables como prorrusos- acerca de si había buscado testimonios del otro lado, el no ucraniano.
Putin sí aparece en "Superpower", pero a través de sus declaraciones bélicas, antes o después de consumar su guerra de agresión. Es un autócrata de mirada gélida, distante y agresivo.
Zelenski es el líder cercano, que da coraje a su población y llama a defender la democracia, tanto en Ucrania como en Europa; inspira fortaleza a los suyos, como lo hace el exboxeador y actual alcalde de Kiev, el coloso Vitali Klitchko.
"Superpower" se estrenaba fuera de competencia en la sección Berlinale Special
"un viaje emocional"
Maite Alberdi presentó luego su documental sobre Augusto Góngora, un filme que por iniciativa del propio periodista y apoyado por su mujer, la actriz Paulina Urrutia, registra su propia fragilidad tras ser diagnosticado de alzhéimer en 2014.
Urrutia explica a Efe que como actriz viene de un mundo en el que "uno se va transformando de manera permanente", por lo que su manera de vivir y de escribir su historia "no tiene ningún tipo de registro".
"Entonces, podrás comprender que el verdadero cómplice de esto fue Augusto, no yo", explica, al tiempo que Alberdi corrobora: "Sí, fue Augusto que desde el principio quiso filmarla" y estuvo muy decidido a contar esta historia, tratando de convencer a su mujer, que no quería.
"Fue muy consecuente de él", dice la cineasta al comentar que Góngora, que filmó toda su vida, estuviera decidido a filmar su propia "fragilidad", porque él "filmó el dolor, la fragilidad, la precariedad de mucha gente que le abrió la puerta" y él abre ahora la suya.
"La Memoria Infinita" es un retrato, desde el respeto y el profundo amor y cariño, de un hombre que durante toda su vida escribió contra el olvido colectivo y se enfrenta ahora él mismo a la pérdida gradual de su memoria.
"nada perturbador"
Para el documental, todos tomaron la cámara. "Es muy coral. Todos grabamos. Grabé yo, grabó la Paulina, grabó Augusto, es una película colectiva, sí. De hecho, está en los créditos como camarógrafo", dice Alberdi.
Apesar de abordar la pérdida gradual de la memoria, "no es una película acerca de lo terrible del alzhéimer", dice la actriz. "Es una película que está tratada desde el cariño, desde el cuidado, desde su conciencia hacia la cámara, desde la conciencia de la persona que más lo quiere en el mundo, que mejor lo cuida (...) decidiendo juntas hasta cuándo grabar, cuándo ya no había que mostrar más", explica la directora.
"No hay ninguna imagen perturbadora" y "por supuesto que hay momentos dolorosos, momentos difíciles, momentos de mucha fragilidad, pero así es la vida".
Tras salir de la primera función del documental, que se proyecta dentro de la sección Panorama, la cineasta se mostró agradecida con el público, "que tuvo un viaje emocional" y se entregó.