Brian Cox, el patriarca de Succession: "Siempre me he visto como comediante"
TELEVISIÓN. El actor habla de su carrera, que explotó a sus 70 y tantos con la serie.
Agencias
Fue el tío de William Wallace en "Corazón Valiente" (1995) o el rey Agamenón en "Troya" (2004), pero el papel de Logan Roy, el implacable patriarca de la serie "Succession", es el que hizo célebre al actor escocés Brian Cox, a sus 76 años.
"Es curioso, porque siempre me he visto como un comediante, pero terminé haciendo esto otro", dice a Efe durante la promoción de la cuarta y última temporada de la serie sobre los Roy, la familia de un magnate de los medios de comunicación creada por Jesse Armstrong para HBO Max.
Ganadora de trece premios Emmy y cinco Globos de Oro, el final de "Succession" es uno de los estrenos más esperados de la temporada.
-Debutó como actor de cine en España, interpretando a Trotski en "Nicolás y Alexandra (1971). ¿Qué le diría hoy a aquel joven que empezaba su carrera en el cine?
-Le diría: te va a ir bien, ten paciencia y no pierdas de vista lo que quieres. Creo que he tenido una suerte enorme, (...), la variedad de mi trabajo es increíble, yo mismo me sorprendo. De joven todo el mundo me decía que el éxito me llegaría cuando fuera más mayor y maduro, pero no imaginaba tener que esperar hasta los setenta y tantos.
-¿Es Logan Roy su mayor éxito?
-Es el papel que me ha despojado del anonimato. Antes, en el pasillo, un tipo me abordó diciendo que me parecía a Logan Roy. Le dije: 'Soy Logan Roy' y contestó: 'Dios mío, eres muy atractivo'; la verdad es que nunca en mi vida me habían dicho que soy atractivo.
-Se debe sentir poderoso en su piel.
-Sí, antes no pensaba que fuera bueno pero ahora sí, la gente se siente intimidada y está bien porque mantienen una distancia respetuosa.
-¿Cuál cree que ha sido la clave del éxito de la serie?
-Está en la tradición de series como "Dallas", "Dinastía" o "Los Sopranos" y al mismo tiempo habla de nuestra época, sobre gente como Elon Musk, Richard Branson, Rupert Murdoch o el horrible Donald Trump. Es una sátira social y también tiene algo de lucha de gladiadores, al ser humano le encanta eso, ver a la gente sufrir.
-Casi siempre ha interpretado a personajes de carácter fuerte o villanos. ¿Considera que eso da más estatus como actor?
-Se suele decir que 'el diablo tiene los mejores tonos' -una frase hecha- y algo de eso es verdad (...), pero no estoy de acuerdo con lo que la gente piensa de Logan, es un incomprendido, un tipo solitario y marginado que solo quiere encontrar a un sucesor entre sus hijos, pero cada uno de ellos falla miserablemente.
-También ha hecho comedias disparatadas como "Super Troopers" (2001), aunque sea menos conocida esa faceta suya.
-Mis héroes de niño eran Jerry Lewis y Dean Martin, juntos eran brillantes, Spencer Tracy también me encanta, con Katherine Hepburn tiene grandes momentos. Siempre me he visto como comediante pero he acabado haciendo esto otro. 'Super Troopers' me encanta, quiero hacer más películas como esa".
-¿Qué proyectos tiene ahora?
-Vuelvo al teatro y se supone que voy a dirigir mi primera película este año en Escocia.