Ucrania prepara nuevas brigadas y unidades que le permitan -junto a las promesas de armamento pesado y las garantías de seguridad de la OTAN- recuperar la iniciativa en el frente.
"La primera línea es la prioridad número uno. También estamos preparando activamente nuevas brigadas y unidades que se probarán en el frente", declaró el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, en su mensaje diario. El mandatario afirmó que "todos en Ucrania deben entender que la tarea principal del Estado es la desocupación de nuestros territorios, la devolución de nuestras tierras y nuestra gente del cautiverio ruso".
"Los recursos del Estado se destinan principalmente a esta tarea. Y estoy agradecido con todos los que ayudan, que mantienen la atención del mundo en Ucrania", indicó, en referencia a la reunión del Grupo de Contacto de Defensa de Ucrania celebrada la víspera en la base de Ramstein, en Alemania. En la undécima reunión de este grupo, los aliados de Ucrania anunciaron la próxima llegada a Europa de los tanques estadounidenses Abrams y expresaron su disposición a incrementar el suministro de sistemas antiaéreos, pero descartaron el envío de los aviones de combate occidentales solicitados por Kiev.
El ministro de Defensa Ucraniano, Oleksii Reznikov, destacó ayer que "cada reunión de este formato no solo nos trae más 'regalos' útiles para el Ejército ucraniano, sino que tiene como fin llevar a los criminales ante la Justicia". "Los resultados del Ramstein 11: Rusia se acerca al Nuremberg II", tuiteó, en referencia al proceso celebrado en la ciudad homónima alemana contra los criminales de guerra de la Alemania nazi.
El viernes, Ucrania firmó un acuerdo con Alemania y Polonia para la creación de un centro operativo para los carros de combate "Leopard2" en territorio polaco, cerca de la frontera ucraniana, donde centralizar las operaciones de mantenimiento o reparación de esos blindados. Reznikov destacó que este "puño blindado" detendrá la agresión rusa "en contra de Europa y todo el mundo libre".
Clave: F-16
El portavoz de la Fuerza Aérea ucraniana, Yurii Ignat, celebró ayer el apoyo en sistemas antiaéreos ofrecidos por los aliados de Kiev, y en particular, la llegada de los Patriot. "Ya tenemos los Patriot. Y prácticamente todo el espectro de armas occidentales que nos prometieron nuestros socios. Pero para que se arme el rompecabezas, falta añadir también los (aviones) F-16", afirmó a la TV ucraniana. Según Ignat, "esto es algo que esperan los pilotos y en general toda Ucrania".
"Los Patriot que llegaron son un refuerzo considerable. Sabemos que este sistema tiene un alcance considerablemente mayor que los S-300 (rusos) y esto nos ayudará en determinados sectores en los que el enemigo utiliza bombas dirigibles desde aviones Su-35", indicó.
Añadió que Kiev espera "también los SAMP/T, también un sistema de largo alcance, y los NASAMS que nos prometieron nuestros socios noruegos".
Eso sí, recalcó que aunque los Patriot mantendrán a raya a los aviones rusos "esto no solucionará del todo el problema". "Solo se podrá solucionar totalmente con los F-16. Ese es el tipo de armamento que puede reaccionar rápidamente y estar allí donde es necesario", concluyó.
Alerta de WAGNER
El jefe del Grupo de mercenarios rusos Wagner, la principal fuerza de asalto rusa en el este de Ucrania, Yevgueni Prigozhin, alertó sobre los riesgos que implica el refuerzo de los sistemas antiaéreos ucranianos y en especial el incremento de la preparación de sus tropas.
Lo realmente preocupante, indicó, es el incremento de la preparación de efectivos ucranianos en Europa.