Expresidente Toledo llega esposado a Perú tras ser extraditado por EE.UU.
JUSTICIA. Exmandatario peruano arribó resguardado por la policía para ser juzgado por presuntos sobornos millonarios de la empresa Odebrecht. Tras la audiencia, fue trasladado al penal de Barbadillo, donde están recluidos otros exjefes de Estado.
Esposado y resguardado por policías arribó ayer a Perú, extraditado desde Estados Unidos, el expresidente del país vecino Alejandro Toledo. El exmandatario llegó al aeropuerto Jorge Chávez para ser juzgado por el proceso abierto en su contra por los presuntos sobornos millonarios de la empresa Odebrecht para adjudicarse la construcción de dos tramos de la carretera Interoceánica sur.
Toledo, quien gobernó en el período de 2001-2006, fue trasladado en un vuelo comercial, procedente de Los Ángeles, en medio de la expectativa de las autoridades peruanas y la prensa local que lo esperaba en los exteriores del terminal y en la sede del Poder Judicial a donde fue trasladado para una audiencia de reconocimiento de identidad.
Arribo
El exmandatario bajó del avión tras ser entregado por alguaciles de EE.UU. a los agentes de la Policía Nacional del Perú, para luego ser conducido a la Dirección de Aviación Policial (DIPA) al lado del aeropuerto.
Por su parte, la fiscal de la Nación (general), Patricia Benavides, y el jefe de Extradiciones del Ministerio Público, Alfredo Rebaza, ingresaron a la Dirección de Aviación Policial para constatar la entrega de Toledo a las autoridades peruanas, según la prensa local.
En ese ambiente, Toledo fue examinado por médicos legistas, antes de ser entregado al Poder Judicial para la diligencia de control de identidad.
Tras pasar los exámenes médicos legales de la DIPA, el exmandatario fue trasladado en helicóptero al cuartel Los Cibeles, para "conducirlo vía terrestre a la Corte Superior Nacional de Justicia Penal Especializada, a fin de realizar el control de identidad", dijo la Fiscalía.
En la Corte, se hizo la diligencia ante el Juzgado de Turno a cargo de la magistrada Margarita Salcedo, quien preguntó a Toledo sus datos personales y le informó del proceso judicial y los delitos por los que estaba acusado: tráfico de influencias y lavado de activos en un proceso que se se encuentra en control de acusación, previo al juicio oral.
Tras la breve audiencia, la jueza dispuso que "el detenido quede a disposición del INPE (Instituto Nacional Penitenciario)" para su internación en un establecimiento carcelario, el cual se presume que será el penal de Barbadillo, donde también están recluidos los expresidentes Alberto Fujimori y Pedro Castillo.
El fiscal del Equipo Especial Lava Jato José Domingo Pérez dijo luego que el proceso contra Toledo "es un caso bastante sólido" y añadió esperar que "el Poder Judicial pueda programar las audiencias de una forma más continua" para "que vaya a juicio oral".
Pérez dijo que "Toledo tiene que estar interno en un establecimiento penitenciario", y que se va a oponer a la intención de la Defensa de pedir arresto domiciliario.
Caso Odebrecht
Reclamado por la Justicia peruana desde 2017, Toledo está imputado por recibir supuestamente US$35 millones de la empresa Odebrecht, tras favorecerla en la licitación para construir la Ruta Interoceánica Sur, entre Perú y Brasil.
La Fiscalía peruana solicitó penas de 20 años y 6 meses de cárcel por la concesión de los tramos 2 y 3 de esta carretera; 35 años por el tramo 4, y 16 años y 8 meses por lavado de dinero en el Caso Ecoteva.
En marzo de este año, el Ministerio Público también pidió la expropiación de los bienes inmuebles del expresidente, y el miércoles pasado, el juez federal Thomas S. Hixson, de la Corte del Distrito Norte de California, ordenó que se entregara para ejecutar su extradición a Perú.