El Mundo Andino y el Litio
Invitado el Instituto de Investigaciones Antropológicas de la Universidad de Chile primero y luego Universidad de Antofagasta, en otras oportunidades invitados por la Corporación Nacional Forestal, CONAF, comencé a recorrer gran parte de la pre cordillera, registrando el quehacer ancestral y la flora y fauna de estas comunidades con miles de años de cultura.
Fue un trabajo lleno de sacrificios. con largos e incómodos viajes por caminos casi inaccesibles. Estamos hablando de fines de la década del 70. Había tramos que hacíamos a lomo de mula, o simplemente de a pie, transportando una antigua cámara analógica, un pesado videograbador y un motor generador para cargar las baterías, ya que en aquella época la mayoría de los pueblos no tenían luz eléctrica. Además, se grababa en cintas, que había que protegerlas del polvo o la chusca, para evitar dañar las imágenes.
Soportando el clima adverso y la altura, recorríamos quebradas, lagunas y salares, acampando en pleno desierto y otras veces en retenes de Carabineros de Chile. Las aventuras y el peligro no estuvieron ausentes, enterrados en la nieve, o patinando en el barro, a veces traspasando los límites fronterizos en plena tormenta o alguna pana mecánica del vehículo. En fin, muchas son las anécdotas que quedaron en la memoria. Toda esta experiencia pionera me permitió contar hoy con un valioso registro antropológico de hace más de treinta años.
Hoy, me preocupa que el Litio se ha transformado en un recurso más de explotación, en un territorio con una cultura que lleva más de once mil años domesticando el desierto más inhóspito el mundo y con una fauna única, con un manejo equilibrado y ancestral de sus recursos, con la sabiduría y simpleza de sus actos como su medicina ancestral, su gastronomía. su artesanía, su cosmovisión del universo.
Creo que es tarea de todos y no sólo de tecnócratas y políticos de turno, sino de la academia de alto nivel, de científicos, biólogos, sociólogos, antropólogos, los que son llamados a evitar la destrucción de una cultura que nos ha enseñado vivir con equilibrio, con armonía y con la simpleza de que todos somos uno solo.
Omar Villegas Documentalista