Pese a su reciente promulgación el 2 de marzo y posterior publicación en el Diario Oficial, el 10, la Ley 21.545 (Ley TEA), que garantiza la inclusión de las personas bajo el espectro autista en el ámbito social, de salud y en la educación, todavía encuentra dificultades para aplicarse adecuadamente en distintos establecimientos de Antofagasta.

Así lo denunciaron algunos apoderados del sistema educacional, tanto municipal como particular pagado en la ciudad, al sostener que pese a la garantía que proyecta la nueva ley, sus hijos todavía no logran ser integrados en sus respectivos niveles, producto de falencias fundamentales como la adecuación curricular.

Implementación

Sonia Rivera, apoderada de la Escuela Claudio Matte Pérez (de la CMDS), que al igual que su hijo de 13 años se encuentra dentro del espectro autista, relató las dificultades y constantes humillaciones que su hijo de séptimo básico ha tenido que enfrentar, producto del escaso manejo de algunos maestros en temáticas de autismo.

"Mi hijo está muy deprimido, se cuestiona haber nacido así; se siente mal, absurdo, ya que la profesora lo humilla; constantemente está escribiendo su nombre en la pizarra, porque según ella trabaja lento, incluso, frente a sus compañeros ha dicho que mi hijo habla puras incoherencias. Está en juego su autoestima, ya que si a un niño lo llenas de notas rojas y además lo humillas, obviamente se siente mal", aseguró.

La apoderada explicó además que "no se trata de mal evaluar, sino de integrar, de no vulnerar los derechos, de mirar a los niños con equidad, de dar igualdad y oportunidad de condición, pero eso no se hace, hoy a mi hijo lo evalúan sin tener consideración de sus habilidades. Se supone que tras la aprobación de la ley, debe haber una adaptación curricular donde se consideren sus conocimientos previa evaluación profesional, pero eso no se hace y son los mismos profesores, quienes aplican los criterios, sin saber cómo trabajar con ellos", precisó.

Rivera agregó que "es importante que toda la comunidad educativa se interiorice en autismo. Un niño con TEA no aprenderá con un montón de materia y textos largos, los teas no aprendemos así, sino con imágenes y señaléticas que nos indican qué es lo que espera la persona, un indicio de lo que espera una persona que no es TEA".

Una experiencia similar manifestó Nathalie Navarro, apoderada del Colegio Santo Tomás, donde cursa su hijo en kínder quien fue diagnosticado desde los dos años.

Según relató, su hijo, que al parecer podría tener altas capacidades cognitivas ya que con solo 6 años es capaz de hacer diversas ecuaciones matemáticas -aprendió a leer y sumar a los 3 años- no ha logrado integrarse en su nivel, desarrollando varias crisis en el aula.

"Hace tiempo que me vienen prometiendo una prueba de IQ (Test de inteligencia), para realizar la adecuación curricular porque mi hijo, que es muy inteligente, cuando termina de hacer sus deberes, se aburre y comienza a escaparse de clases. A sus compañeros recién le están enseñando a leer entonces se para, tiene comportamientos disruptivos, golpea el basurero, se escapa y la verdad es que no saben cómo tratarlo, varias veces se ha descompensado y ha llegado llorando de clases. Antes había una asistente de educación que sabía de autismo, sabía cómo motivar a mi hijo, pero desde que la echaron, se nota más que mi hijo es autista", dijo.

Mineduc

Consultado por estas materias, y de qué manera la Ley TEA ha podido garantizar desde su implementación, la inclusión educacional en alumnos con autismo (además de consultar por un plan, plazos y objetivos regionales de la nueva ley), desde el ministerio de Educación, el responsable del Comité de Desarrollo Profesional Docente, Claudio Lillo, explicó que serían los encargados de convivencia de cada establecimiento, los responsables de llevar a cabo lo concerniente con la adecuación escolar y el cumplimiento de las garantías educativas, al alero de la nueva ley.

"Como órgano consultivo, solo podemos sugerir que se generen acciones o dispositivos para apoyar el desarrollo docente, sobre todo lo que dice relación con el trabajo colaborativo y prácticas pedagógicas. Cada establecimiento tiene un plan de formación local donde puede generar distintas acciones específicas para el desarrollo docente; en el caso planteado (inclusión estudiantes TEA), se puede trabajar por medio de los planes de convivencia escolar", detalló el abogado.

En tanto, desde la seremi de Educación, declinaron referirse al tema, de momento.