La resiliencia es un concepto que ha adquirido gran relevancia en los últimos años, sea para una comunidad o nación, como para las personas individualmente consideradas. Sobre todo desde una visión positiva de la vida, tomando en cuenta aquellas fortalezas que nos ayudan a superar la adversidad.

Cuando se menciona a la resiliencia, solemos pensar en hechos traumáticos, como la pérdida de un ser querido, sobrevivir a un accidente u otras situaciones sumamente complejas: los terremotos en Chile, por ejemplo. Pero en nuestro día a día también se dan hechos difíciles que tenemos que enfrentar. No hace falta que suceda una catástrofe; superar cualquier dificultad cotidiana, como hacer frente a las críticas, conseguir sobreponerse a un problema sentimental, o simplemente llegar al lugar de trabajo con una sonrisa tras un tropiezo, también es ser resiliente.

Hay personas que son resilientes porque han tenido un ejemplo de resiliencia a seguir - como sus padres, un hermano o un amigo -, pero otras han aprendido a lidiar y sortear los obstáculos del camino por sí solas; han aprendido a partir del ensayo y el error, se han hecho fuertes a partir de sus propias caídas. Es fácil para muchos hacer escarnio de los demás, sobre todo cuando un oponente se equivoca y comete errores. El caso de José Antonio Kast, líder del Partido Republicano de Chile, es un buen ejemplo de aquello. Ha sido criticado, vilipendiado y acusado de ser hasta el mismísimo "demonio". Pero mantuvo la calma, fue resiliente, habiendo adquirido esta última característica luego de mil batallas contra la discriminación y la odiosidad por sus ideas conservadoras. En suma, fue capaz de perseverar. Así, pudo superar un sinnúmero de dificultades y malos momentos, y logró imponerse. Y conste que yo no soy seguidor de su partido político; sólo que nobleza obliga.

Lo anterior se basa en mi propia experiencia y conocimientos adquiridos a través de largos años, en los que he debido lidiar con cientos de problemas, algunos complicados en extremo. Lo cual estaría indicando que la resiliencia es una habilidad que todos podemos desarrollar y, por lo tanto, practicar. Para ello, es necesario trabajar adecuadamente nuestros pensamientos, emociones y fortaleza espiritual. Esto último logré vivirlo y potenciarlo durante una larga estadía en India, una situación fortuita por la cual estoy eternamente agradecido a mi padre.

Las personas resilientes tienen, como los juncos, la capacidad de ser flexibles cuando el viento sopla con fuerza en su contra. Saben que enfrentarse a ciertas circunstancias aciagas les hará perder energía y optan por tener una mente abierta. Se desprenden de algunos viejos prejuicios e inseguridades, para realizar cambios sin abandonar los principios esenciales. Pero no se adaptan con resignación, sino porque entienden que existen otros caminos diferentes, que no por ser distintos son erróneos, y que a través de ellos se puede llegar a la misma meta. Esta es la esencia de la resiliencia mental.

José Miguel Serrano

Opinión

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Las personas resilientes tienen, como los juncos, la capacidad de ser flexibles cuando el viento sopla con fuerza en su contra. Saben que enfrentarse a ciertas circunstancias aciagas les hará perder energía.

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Economista Universidad de Columbia

La historia del 'ruco motel' en la ciudad nos expone nuevamente frente a la visibilidad de Antofagasta en los medios nacionales. Eso se suma al 'docureality' que hizo nuestro alcalde en las redes sociales y nos hace cuestionarnos si esta urbe ha caído en la estrategia edilicia de un 'mundo paralelo', o lisa y llanamente estamos en presencia de una política freak en la perla del norte. A esto se debe agregar una publicación 'inusual' en la que aparecieron el Gobernador Regional (Ricardo Díaz) y jefe comunal (Jonathan Velásquez) en una actividad de los 70 años de la Caja Los Andes, una corporación de derecho privado con patrimonio propio (El Mercurio de Antofagasta, 21/05/2023). Dada mi deformación profesional, me causó suspicacia y me fue imposible no pensar en la preocupación fantasmagórica que recae sobre nuestra historicidad y que asocia el poder al dinero, el mal llamado financiamiento de la política. Sin embargo, sin evidencia ni siquiera se puede dejar instalada la sospecha, sólo decir que la ciudad sufre de una 'política bizarra' en todas sus manifestaciones y en todos sus niveles de servicio público.

Si analizamos la literatura sobre 'Freak Politics' (Política Freak) en el mundo, nos encontramos con una asociación directa a las visiones progresistas de las izquierdas, la política como un show mediático, y tal vez la asociación que hace Daniel A. Foss (Freak culture; life-style and politics, 1972) entre los movimientos juveniles de 1960, la 'Nueva Izquierda' y los movimientos obreros de principios de la década de 1920, rescatando una especie de ideología hippie asociada a lo 'freak'. En el libro La forma de ganar: tomando la Casa Blanca (The Way to Win: Taking the White House, 2008), los periodistas políticos Mark Halperin y John F. Harris analizan las estrategias políticas de las familias Bush y Clinton en la carrera presidencial por el país más poderoso, Estados Unidos, llegando a la conclusión de que la 'política freak' obedece a una cultura política que proporciona incentivos para candidatos/as, activistas, grupos de interés y medios de comunicación, y que enfatiza el extremismo ideológico y el ataque personal. Por lo que podríamos concluir que la 'política monstruosa' ya se viene experimentando hace más de una década a nivel internacional y nacional.

Entonces, ¿nuestra forma de hacer política en la ciudad-región es realmente bizarra?, ¿el poder enloquece como en la tragedia de Macbeth de Shakespeare, o habrá liderazgos introvertidos, pero cuerdos y cautos que no se atreven a tomar el sartén por el mango? Me imagino que en las próximas elecciones municipales veremos emerger esta tipología de líderes o lideresas, dado que ya no podemos ensartarnos con 'los sospechosos de siempre' (Bryan Singer, 1995). Por lo de pronto, nos queda seguir soportando la política bizarra del alcalde por un tiempo más (no creo que lo destituyan), seguir aguantando la fatiga de discurso del Gobierno Regional y la Delegación Presidencial y sus estrategias de inacción en preocupaciones fundamentales de la ciudadanía, y las tácticas de vieja política de nuestros/as parlamentarios/as.

Dra. Francis Espinoza F.

Opinión

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Me imagino que en las próximas elecciones municipales veremos emerger esta tipología de líderes o lideresas, dado que ya no podemos ensartarnos con 'los sospechosos de siempre'.

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Académica UCN