La alta prevalencia de enfermedades respiratorias ha determinado una serie de medidas por parte de autoridades de salud, como también recomendaciones de expertos de distintas especialidades con el fin de contener la alta propagación de contagios, especialmente en menores de edad.

De acuerdo a datos del Ministerio de Salud, desde las semanas 16 a la 21 (16 al 22 de abril y 21 al 27 de mayo) de este año ya se registran seis semanas consecutivas sobres las 4 mil consultas por causas respiratorias. Incluso con dos semanas rondando las cinco mil atenciones de este tipo (semanas 20 y 21). En cambio, hasta la semana 21 del año pasado, solo en esta última semana se habían superado las 4 mil consultas por enfermedades respiratorias.

Un panorama epidemiológico que alerta a especialistas, debido a que recién comienza el período más crítico por la propagación de virus respiratorios (junio, julio y agosto). Pamela Schellman, presidente del Colegio Médico de Antofagasta, explicó que el autocuidado ante la alta expansión de los virus respiratorios hoy considera incluso el uso de mascarillas. "Recordemos que todas las personas podemos responder de diferente manera a un mismo agente que nos infecta. Por lo tanto, si yo tengo un cuadro respiratorio banal, a otra persona con otras condiciones, puede el mismo virus generarle un problema mayor. Todo lo que podemos hacer para disminuir la posibilidad de contagiar a otros es importante en este momento".

"Si tenemos síntomas respiratorios, no graves y podemos seguir yendo a nuestro trabajo, consideremos utilizar mascarillas en ese periodo para evitar contagiar a nuestros compañeros de trabajo y de esta manera disminuir la circulación de virus. Niños, niñas y adolescentes con síntomas respiratorios idealmente pudieran quedarse en su casa para no contagiar a sus compañeros de curso; pero si no es posible para ellos, entonces, el uso de mascarillas en la sala de clase puede ser una estrategia muy útil para disminuir la circulación vial dentro de las escuelas", agregó Schellman.

El miércoles pasado, en tanto, la directiva nacional del Colegio Médico envió una carta al ministro de Educación, Marco Antonio Ávila, con el fin de que se instruya a los directores de establecimientos educaciones de abstenerse de solicitar el certificado médico para justificar inasistencias a clases durante los meses que dura la campaña de invierno. Como también para que se informe a los padres y cuidadores de escolares que se abstengan de asistir a los servicios de urgencia si el estado de salud de sus niños y niñas no lo requiere.

Al llamado por una mayor prevención para evitar contagios se sumó el pediatra del Hospital Regional de Antofagasta (HRA), Matías Morales. "Este invierno debemos seguir cuidándonos por nuestros niños. Evitemos exponerlos a lugares cerrados, a lugares muy aglomerados. Además, ventilemos espacios, ya que así la circulación de aire se ve favorecida, tanto para ellos como también para nosotros. Aquellas pequeñas cosas que aprendimos en la pandemia, sigamos aplicándolas en esta campaña de invierno 2023", dijo.

Ocupación camas críticas

Mientras que Francisco Grisolía, director del Servicio de Salud de Antofagasta (SSA), al empezar la temporada de invierno llamó a la comunidad a un buen uso de los servicios de urgencia de la red.

"Cuando la urgencia es de menor complejidad y no implica riesgo vital, se deben utilizar de preferencia los servicios de urgencia de atención primaria (SAPU y SAR). Los servicios de emergencia hospitalaria deben reservarse para urgencias de mayor complejidad, que impliquen riesgo vital o requieren atención inmediata; como la atención se privilegia por estado de gravedad y no por orden de llegada, es posible que los casos menos complejos deban esperar por atención".

"El SSA ha estado trabajando activamente ante el aumento de enfermedades respiratorias en la región. Aumentando la capacidad en los servicios de urgencia de la red, y el número de camas críticas, entre otras medidas, para hacer frente a la demanda creciente de atenciones provocada por el incremento en la circulación de virus respiratorios. Para lograrlo, se ha dotado a la red con los recursos necesarios para que pueda ejecutar las estrategias enmarcadas en la Campaña de Invierno (…) Nuestra red hospitalaria de alta complejidad ha tenido una ocupación sobre el 95% en unidades de paciente crítico adulto, y alrededor de 60% en unidades de paciente crítico pediátrico. Hemos inyectado también recursos a los establecimientos con el objetivo de ampliar la oferta de camas críticas en la región, tanto de pacientes adultos como pacientes pediátricos. Además, se ha reforzado la dotación para poder abrir más camas, y se han generado estrategias para favorecer las altas hospitalarias, y así mantener siempre un número suficiente de camas críticas disponibles", añadió Grisolía.

El director del SSA precisó que la red pública de salud regional permanece conectada a la red hospitalaria nacional, mediante la Unidad Centralizada de Camas Críticas (UGCC), lo que permite solicitar camas en otras regiones del país si el caso así lo amerita.