C. Cerda y B, Saavedra

"En su mayoría son vehículos provenientes de Chile", explica el capitán de Carabineros, Fernando Fierro, jefe de la Sección Encargo y Búsqueda de Vehículos (SEBV) de la Prefectura de Antofagasta, sobre la venta de los denominados autos robados o "chutos" comercializados en Bolivia.

El caso de los tres chilenos que viajaron a Bolivia para recuperar un camión robado en junio pasado en Calama, uno de los cuales quedaría parapléjico tras un recibir un impacto de bala en medio de esta búsqueda, ha evidenciado con fuerza la alta frecuencia y los riesgos a los que se exponen las víctimas de este tipo de delitos en la región.

El capitán Fierro comenta, sin embargo, que el robo de camiones resulta poco frecuente. "Generalmente en la Región de Antofagasta el robo de camiones, que son vehículos de gran envergadura, no es muy común, es poco frecuente. (Esto) obedece también a la complejidad de la envergadura de los vehículos para posteriormente trasladarlos a Bolivia, sobre todo por los pasos no habilitados o porque para ocultar los camiones es un poco más complejo. Lo otro es que esta sustracción de vehículos generalmente está ligada a bandas que tienen un poco más de organización, ya que para comercializar este tipo de vehículos también requieren de mayores recursos las personas que lo van a adquirir. Estamos hablando de sumas de 30 mil a 50 mil dólares (hasta $40 millones)", afirma Fierro sobre los montos pagados en Bolivia por camiones que en Chile poseen un valor de unos $70 millones a $100 millones.

Según datos de Carabineros de la Prefectura de Antofagasta, menos del uno por ciento corresponde a robo de camiones, lo que se reflejaría en ocho camiones de alta envergadura (tractocamiones) robados este año. Las pesquisas, en tanto, para rastrear vehículos robados en la región y comercializados en Bolivia presentarían una alta complejidad por el alto número de bandas dedicadas a esta labor ilícita y receptores dispuestos para adquirir este tipo de bienes.

"Como es conocido en Bolivia, pese a que están trabajando en la actualidad para mitigar la compra de vehículos con encargo por robo de provenientes desde Chile, generalmente es un mercado muy muy fácil de encontrar, porque hay gran variedad de compradores en distintas partes del país de Bolivia. Son conocidas las 'ferias chutas' o los lugares donde venden los vehículos 'chutos'. Se ofertan los vehículos de forma pública, inclusive a través de las redes sociales. En su mayoría son vehículos provenientes de Chile", añade Fierro.

De acuerdo con registros de la Subsecretaría de Prevención del Delito, en 2022 en la Región de Antofagasta se registraron 2.031 robos de vehículos motorizados. Una cifra que representa una fuerte alza comparada a los 1.505 vehículos robados en 2019, previo al inicio de la pandemia. Este año, en tanto, esta entidad reporta 510 vehículos robados.

Modalidad de robos

En la SEBV en la Prefectura de Antofagasta, en tanto, reconoce variantes en el modo de operar las bandas dedicadas al robo de vehículos. "Respecto al tipo de estrategia, han ido evolucionando las bandas criminales que operan. Ya no lo hacen como hace un tiempo, donde forzaban el sistema de arranque del vehículo. En la actualidad operan con aparatos tecnológicos, me refiero a los escáneres, donde una vez que ingresan al vehículo intervienen los computadores y logran clonar las llaves para sustraer estos automóviles (…) El escáner es una especie de computador, tablet, que portan estos sujetos. Invierten cerca de un millón o un millón y medio de pesos, y con este aparato los sujetos conectan el computador del vehículo y cambian la configuración que está asignada para ese móvil, y la asignan a una nueva llave; es decir la clonan", comenta Fierro.

"En su mayoría son chilenos y a contrario de la percepción sobre los sujetos que operan, son mayores de edad, entre los 18 años, 25 y hasta 30 años. Se mueven o desplazan de tres a cinco individuos, y estos sujetos fácilmente de una semana a otra pueden variar su vinculación con otras bandas delictuales. Es decir, en una banda delictual si hay cinco delincuentes, dos pueden migrar a otra banda y operar durante un tiempo en ésta. Luego pueden regresar; en ese sentido hay movilidad por parte de estos delincuentes", agrega el encargado de la Sebv, quien detalla que este año la Prefectura de Carabineros de Antofagasta ha recuperado 555 vehículos robados.

Traslado a frontera

De acuerdo a datos de la Subsecretaría de Prevención del Delito, este año en la comuna de Antofagasta se registran 299 robos de vehículos motorizados. Un registro que reporta 177 casos en Calama. "Lo que están priorizando los delincuentes en la actualidad es sacar en el menor tiempo posible el vehículo, y las características geográficas de la región ayudan en ese sentido, porque la distancia entre la frontera desde la ciudad de Antofagasta, por ejemplo, es de tres horas y media a cinco horas en que fácilmente podría estar el vehículo en Bolivia. Estos robos o sustracciones generalmente ocurren en horarios nocturnos, lo que dificulta la denuncia de la persona que generalmente se percata al día siguiente o en horario de la mañana".

"Estos sujetos así estarían llegando a las cercanías de la frontera, y tras una previa coordinación, los ciudadanos de nacionalidad boliviana estarían ingresando por paso no habilitados, reciben los vehículos lo aceptan y luego regresan a su país a través de los pasos que ellos conocen", precisa el capitán Fierro, quien detalla que las transacciones por vehículos robados se concretan a través de pago en dinero, drogas o armamentos. El capitán Fierro agrega que ante un robo de vehículo debe seguirse los canales formales, que incluye denunciar ante las policías y Fiscalía estos ilícitos, con el fin de evitar peligros ante eventuales búsquedas adoptadas por los afectados.

Zona peligrosa

Los gobiernos de Chile y Bolivia, luego del caso del camionero, se reunieron en Iquique para firmar un acuerdo que permita que la Dirección Nacional de Prevención e Investigación de Robo de Vehículos (Diprove) de Bolivia cuente con los datos de las SEBV de Carabineros de Chile en relación a los autos robados para agilizar su búsqueda y recuperación. Aún así, la frontera es una zona muy difícil de resguardar que permite el contrabando, hay mitos de algo llamado la Noche de Los Búhos en la que un solo auto va alumbrando el camino con una fila detrás a oscuras.

"A veces estas bandas delictuales ocupan la modalidad hibernación, donde una vez que sustraen los vehículos los van acumulando en sectores de difícil acceso para verificar si estos vehículos tienen algún sistema de ubicación satelital, los GPS", dice Fierro, quien revela que Carabineros ve dónde se producen los delitos, dónde se desplazan, en qué horarios y su rango de acción. "Constantemente estamos generando operativos, reforzando los servicios nocturnos en los días y horarios que hemos detectado que estas bandas se están movilizando", complementa.

"Las zonas de contrabando son las más peligrosas, todos andan armados y siempre están en caravanas los delincuentes. Los caminos están en buen estado y estar ahí para nosotros es recuperar vehículos de forma certera", cuenta Hugo Bustos, director del grupo Búsqueda de Vehículos (GBV) que han llegado a Ollagüe y hasta Bolivia por estas labores.

"Todas las recuperaciones son por medio de patrullajes en terreno, donde más se encuentran vehículos robados es en la zona norte, desde Antofagasta hasta Iquique, y por frontera es el triple de vehículos, todos salen por pasos no habilitados", agrega Bustos, complementando que "casi todos los reportes son delitos violentos, estos robos son ingresados por medio de nuestra página web www.gbvong.cl creando una base de datos que se utiliza con una aplicación para consultar patentes".

El GBV está compuesto, actualmente, por 1.200 integrantes y este año ha logrado recuperar 12 vehículos en Bolivia, donde recientemente detuvieron a Heber Huañarraya, un policía de 30 años, acusado de asesinato en grado de complicidad y robo agravado por el caso de Mario Bello. Sabía de la ubicación del camión antes de ser robado desde Calama.

"La cultura o su forma de ver la compra de vehículos indocumentados está normalizado, es un sistema lucrativo para todos. En vez de regresar los vehículos se los entregan a la presidencia y hacen uso de ellos", dice Bustos sobre la cultura sin patente detrás de la frontera. Y agrega que "ir a buscar un auto a Bolivia es lo más peligroso, pueden hasta matarte".