Cultura de reciclaje a años luz
Hay muchos emprendedores que están expectantes respecto a lo que pueda hacer el Estado para incentivar una economía circular. La basura que va a para a el desierto, a las playas o la vía pública, estamos también al debe, no existiendo una cultura respecto a los daños que esto genera.
Las regiones del norte del país son las más retrasadas en términos de reutilización de los recursos y reciclaje. Todo el mundo quedó impactado con la noticia de los gigantescos botaderos textiles, pero este no es el único problema, ya que en general hay problemas con la correcta gestión de los desechos domiciliarios, el aseo y ornato de las calles de la ciudad y también con la gran cantidad de basura, que va a dar a las playas y en zonas desérticas.
Está claro que hay muchas cosas por hacer, pero el principal problema es que no se ha comenzado por ninguna.
Actualmente, los puntos limpios son insuficientes para la población de la región, pero también hay una escasez de empresas que realizan trabajo de reciclaje de los desechos que se producen a nivel local y para la mayoría de los productos es necesario trasladarlos a Santiago, lo que finalmente es contradictorio si se busca aportar al medio ambiente.
Tampoco desde lo público no se ha podido apalancar los recursos para una planta a gran escala que se encargue del reciclaje y tampoco se ha generado un plan para retirar y separar residuos, donde todo se va al mismo lugar, a un relleno sanitario.
En cuanto a la basura que va a parar al desierto, a las playas o a la vía pública, estamos también al debe, no existiendo una cultura en la ciudadanía respecto a los daños que esto genera, no solo a la imagen de la ciudad, sino al medio ambiente en general y a los demás organismos que conviven con el ser humano.
El Gobierno tiene entre sus objetivos apuntar hacia el cuidado al medio ambiente con el fin de dejar un mejor planeta a las nuevas generaciones, no obstante es claro que hace falta una mirada desde lo regional, considerando las brechas existentes en las zonas extremas. Hay muchos emprendedores que están expectantes respecto a lo que pueda hacer el Estado para incentivar una economía circular.