En la rehabilitación que se realiza en los 19 centros de la Región de Antofagasta, el consumo de pasta base predomina entre los usuarios que toman la decisión de tratar su problema de consumo. Tratamiento que puede extenderse entre ocho meses y un año, además de tener otro año de seguimiento por parte de los programas que promueve el Servicio Nacional para la Prevención y Rehabilitación del consumo de Drogas y Alcohol (SENDA) que atendió 1.058 casos durante el año pasado y 638, a la fecha, del presente.
"La principal droga por la que ingresan las personas a tratamiento, por lo menos acá en la región, es por pasta base, seguido por marihuana, alcohol y cocaína. En general la pasta base y cocaína son drogas muy adictivas. En realidad todos los tipos de drogas generan dependencia. Esto significa que las personas, en el fondo, pierden cierta capacidad para tomar decisiones de su vida personal", explicó Néstor Maizares, director regional del SENDA.
La institución informó que, en la región, la paste base encabeza la lista de sustancias por las cuales 408 usuarios ingresaron a rehabilitación, seguidos de 256 por marihuana, 247 por alcohol y 74 por cocaína. Proceso voluntario que puede extenderse hasta un año, en el que las personas tratan el problema por el cual pierden vínculos familiares, ingresos económicos, relaciones sociales, etcétera. Y se considera que es vital el apoyo de una red de personas cercanas o la familia para su éxito.
"El año pasado, en general, tuvimos en la región 1.058 casos en los 19 centros de tratamiento", mencionó Maizares sobre esta cifra que lideró la población adulta con 544 casos en 2022. Tendencia que se mantiene este año con 358 de 638 casos atendidos hasta la fecha (ver recuadro). Nueve centros se encuentran en Antofagasta, seis en Calama y uno en Tocopilla, San Pedro de Atacama, Mejillones y Taltal, donde funcionan los programas en los que también participan personas en situación de calle e infractores de la ley.
Programas
Recientemente en Tocopilla 12 personas egresaron de un Programa Ambulatorio Intensivo (PAI). Esto significa que tienen la posibilidad de recuperar vida familiar, laboral, salud física y mental. Maizares detalló aquí no termina este proceso, ya que se inicia un seguimiento de monitoreo por un año.
Este programa significó llevar a cabo tareas de consulta de salud mental, consulta médica, intervención psicosocial de grupo, consulta psicológica, psicoterapia individual, psicoterapia de grupo, psicoterapia familiar, psicodiagnóstico, visita domiciliaria, visita integral de salud mental, intervenciones comunitarias, exámenes de laboratorio y medicamentos.
En Tocopilla 94 personas se han atendido en el PAI entre 2022 y lo que va de 2023: 61 hombres y 33 mujeres. La edad promedio de ingreso es de 40 años. "Es una edad productiva de las personas que mantienen a su familia en los procesos personales, pero el llamado es hacer el trabajo preventivo y con la población infanto-adolescente. Creo que hay un trabajo muy importante que tenemos que realizar como sociedad en general. Y el otro tema es el de los prejuicios y los estigmas, porque muchas personas llegan a tener problemas de consumo, pero por este tema de generación y otros temas más, a veces les cuesta pedir ayuda", explicó Maizares.
Además del PAI existe el Programa Residencial que pueden ejecutar instituciones como Cesfam, Cepas, Tabor, Causana, Cosam y hospitales para llevar a cabo la rehabilitación. Al fono 1412 puede consultar por tratamiento o derivación a algún dispositivo de la región.
Finalmente Maizares destacó que hay centros en Calama y Antofagasta dedicados a las mujeres para que no pierdan el vínculo con sus hijos en este proceso: "El tema de la recuperación de mujeres a veces es mucho más complicado por el tema de los roles, las funciones, el estigma que existe asociado".