Argentina enfrenta inédito escenario de tres tercios luego de la irrupción de Milei
ELECCIONES. El candidato de ultraderecha superó el 30% de los votos y superó a las coaliciones de derecha tradicional y kirchnerista. De cara a la segunda vuelta tras las elecciones de octubre, afirmó que "vamos a ganarle a cualquiera".
El panorama electoral argentino sufrió un verdadero terremoto con la irrupción del ultraderechista Javier Milei como primera mayoría en las elecciones primarias y convirtió una política históricamente binominal una de tres tercios en la que la nueva estrella emergente se enfrenta con el oficialismo kirchnerista y la derecha tradicional.
Con el 97,39% de las mesas escrutadas, equivalentes a poco más de 24 millones de votos, Milei se convirtió en el candidato más votado con 30,04% (único postulante de La Libertad Avanza), con lo que se impuso a la lista Juntos por el Cambio (derecha) que sumó 28,27% y eligió a Patricia Bullrich como su postulante a la Casa Rosada, y también superó a Unión por la Patria (kirchnerismo) que alcanzó 27,27% y optó por el actual ministro de Economía, Sergio Massa, como su carta a la presidencia.
En números absolutos, Milei sacó dos millones de votos más que Massa y tres millones más que Bullrich. Serán las tres grandes figuras que se enfrentarán en la elección del 11 de octubre próximo.
Además de Milei, Bullrich y Massa, obtuvieron el respaldo suficiente para presentarse a las presidenciales del 22 de octubre el peronista no kirchnerista Juan Schiaretti y la candidata del Frente de Izquierda y de Trabajadores Myriam Bregman.
"Ganarle a cualquiera"
Con el entusiasmo que le dio el triunfo, Javier Milei dio entrevistas durante toda la noche posterior a las elecciones y ayer siguió sin parar con su discurso de completa seguridad ante la eventual segunda vuelta.
"Nos da lo mismo a quién enfrentarnos. Vamos a ganarle a cualquiera porque somos los únicos que sabemos lo que hay que hacer, sabemos cómo hacerlo, tenemos el coraje para hacerlo y porque la mayoría de los argentinos ya se dio cuenta que una Argentina distinta es imposible con los mismos de siempre", dijo al diario Clarín.
Ya lanzado, expuso en La Nación que con su anunciado ajuste económico en caso de ser elegido "no pienso tocarles el bolsillo a los trabajadores; el ajuste se lo voy a cargar a la política. Que "va a ser difícil llegar a una transición con un gobierno que ya está terminado". Y que "si soy presidente mis aliados son Estados Unidos e Israel". y adelantó que haría lo mismo que hizo Donald Trump: trasladar la embajada en Israel de Tel Aviv a Jerusalem.
Fernández y Macri
Durante la jornada, el presidente argentino, Alberto Fernández, reconoció en un mensaje publicado en su cuenta de Twitter que "hemos oído la voz de nuestro pueblo. Ahora empieza la verdadera campaña en favor de la democracia y los derechos de la gente. Vamos a continuar unidos, defendiendo la patria y el trabajo, cuidando los derechos de la gente".
En la contraparte el exmandatario Mauricio Macri, único jefe de Estado de derecha de las últimas décadas, felicitó a los argentinos que plantearon un "cambio profundo".
"Sumando los resultados de Javier Milei y los nuestros, es enorme esta mayoría de argentinos que planteamos un cambio profundo como no existió en décadas. Gracias a todos los que nos acompañaron".
"La Argentina está entrando en un cambio de era que deja definitivamente atrás ideas dañinas que han ocasionado solamente problemas, pobreza y desunión. Felicitaciones a Patricia (Bullrich) por la campaña, por la fuerza y el corazón que le puso", agregó.
Lo que muchos evalúan también es el impacto que pueden tener en octubre quienes decidieron no votar en esta elección: la participación en las PASO fue del 69,62%, casi siete puntos porcentuales menos que en las de 2019, cuando se llegó al 76,4 % del censo electoral.