La alta violencia escolar se ha posicionado como un permanente desafío para autoridades del Ministerio de Educación (Mineduc), como también para los sostenedores de establecimientos y la misma comunidad escolar, ante los periódicos episodios de altercados que involucran a miembros de distintos recintos educacionales.

Una realidad que evidencian frecuentes hechos de violencia entre estudiantes difundidos a través de videos en redes sociales, que en ocasiones incluyen la participación también de adultos.

De acuerdo a datos a nivel país de la Superintendencia de Educación (Supereduc), el denominado maltrato a miembros adultos de la comunidad educativa; en el primer trimestre de este año, registra 43 casos. Esta cifra aumentó a 152 casos en el segundo trimestre, con un total de 195 episodios de este tipo en ambos periodos. Mientras que en el denominado maltrato a párvulos y/o estudiantes evidencia un alza mayor, al pasar de 843 a 2.375 casos entre el primer y segundo trimestre, con una cifra global de 3.218 denuncias en estos seis meses educativos.

María Luz Gálvez, directora de Educación de la Corporación Municipal de Desarrollo Social (CMDS) de Antofagasta, detalla que para enfrentar esta contingencia desde esta entidad han adoptado medidas en los recintos educacionales a cargo del municipio.

"Con respecto a la violencia, tenemos que tener claro que no es un hecho que no ocurre preferentemente en los establecimientos, sino que hoy día, usted, lo ve que es una situación de la sociedad en general. Sin lugar, también se ha traspasado hacia nuestras escuelas y liceos; pero los niños ven esa violencia a diario, en la casa, en la calle, en la televisión. Lamentablemente, esos son los ejemplos que tienen. Nosotros hacemos todos los esfuerzos posibles. Tenemos un encargado de convivencia escolar comunal y, a su vez, todos nuestros establecimientos cuentan con encargados de convivencia escolar con 44 horas de contrato. Además, con todos los protocolos que existen para ir generando menos niveles de violencia e incentivando a los niños en una sana convivencia, con actividades deportivas y recreos entretenidos".

"Ha bajado a nivel interno (violencia escolar), pero es complejo porque se van a pelear a las plazas o en la esquina del establecimiento. Ahí nosotros, entonces, perdemos un poco la visión de lo que ocurre", añade Gálvez. Desde distintos Centros de Padres y Apoderados en la región, se ha reconocido que en casos de violencia escolar persiste un número no visibilizado de casos, debido a situaciones y contextos de violencia que no se denuncian.

Alza regional

Según datos de la Supereduc, en la Región de Antofagasta durante el primer trimestre de este año se registraron tres casos de maltrato a miembros adultos de la comunidad educativa, que en el segundo trimestre aumentaron a cinco. Mientras que de nueve casos de maltrato a párvulos y/o estudiantes, reportados en el primer trimestre, estos se incrementaron a 71 en el segundo trimestre.

En una reciente entrevista el ministro de Educación, Nicolás Cataldo, detalló que entre una serie de iniciativas de la cartera se incluyen medidas sancionatorias para enfrentar la violencia escolar. "Una ley mucho más marco de los temas de convivencia, salud mental, prevención del consumo de drogas, alcohol y también sanciones vinculadas a violencia contra los profesores", dijo.

Plan A Convivir se Aprende

El seremi de Educación, Alberto Santander, afirmó que preocupan "enormemente" las situaciones de violencia al interior de los establecimientos educacionales.

"El crear buenos ambientes de convivencia se ha convertido en un aspecto muy relevante y prioritario en el proceso post pandemia, por ello, desde el año pasado estamos trabajando como Seremi de Educación en conjunto a profesionales de la Escuela de Psicología de la UCN con establecimientos educacionales de Antofagasta y Tocopilla con el Plan A Convivir se Aprende. Un plan que busca gestionar la convivencia escolar y prevenir la violencia, el cual se amplió este 2023 a Mejillones y Calama. Es así que ya nos encontramos trabajando directamente con cuatro comunas de la región para tratar la convivencia escolar. Esto se traduce en tres puntos: sesiones con encargados de convivencia de los establecimientos educacionales para desarrollar habilidades de gestión; también formación a docentes y equipos psicosociales en diversas temáticas como el abordaje de la violencia escolar y salud mental escolar; y, así mismo, se considera un acompañamiento focalizado a equipos de 18 establecimientos educacionales de la región".

"Debemos considerar también el Programa Habilidades para la Vida, que entrega acompañamiento para gestionar la salud mental de establecimientos de Taltal, Tocopilla, Calama y Antofagasta, destacando que este año también amplió su cobertura a más unidades educativas. Continuaremos trabajando para crear buenos ambientes de convivencia, lo que favorece enormemente los aprendizajes en el aula", explicó Santander.

Con el objetivo de mejorar la seguridad al interior del Centro de Internación Provisoria y Centro de Régimen Cerrado (CIP-CRC) de Antofagasta, el Consejo Regional (Core) aprobó los recursos para la adquisición de un equipo de escaneo corporal con tecnología de ondas milimétricas, lo que mejorará las condiciones de seguridad general del recinto, simplificará el proceso de revisión.

El director regional (s) del Sename, Róbinson Alcayaga, destacó el apoyo del Consejo Regional a la iniciativa. "Fue una ardua labor que se construyó de manera conjunta entre las asociaciones de funcionarios, profesionales de la Dirección Regional de la unidad de planificación y el apoyo de distintos equipos de Gendarmería. Agradecemos a todos quienes hicieron posible este proyecto".

Entre los principales beneficios del escáner corporal con tecnología de ondas milimétricas, se cuentan que permitirá contar con herramientas para mejorar la seguridad, salvaguardar la integridad física de los jóvenes atendidos, así como de los profesionales y personas que interactúan diariamente en el Centro de Justicia Juvenil de Antofagasta.

Por otra parte, se espera una disminución de los eventos críticos derivados de ingresos de elementos prohibidos al centro, mejorando la sensación de seguridad del recinto.

El costo total del proyecto es de $278 millones.