La detención de un exembajador de EE.UU. por espiar para Cuba causa revuelo en Bolivia
CASO. Manuel Rocha fue quien impulsó la primer candidatura de Evo Morales.
La detención del exdiplomático estadounidense Manuel Rocha, acusado de espiar para el Gobierno de Cuba, causó revuelo en Bolivia, donde la oposición recordó que unas polémicas declaraciones suyas cuando fue embajador en ese país terminaron impulsando la candidatura de Evo Morales en los comicios de 2002.
Rocha, de 73 años y que fue embajador en varios países de Latinoamérica, está acusado de "cometer múltiples crímenes federales al actuar secretamente durante décadas como agente del gobierno de la República de Cuba", detalló el Gobierno estadounidense en un comunicado.
"Esta acción expone una de las infiltraciones de mayor alcance y más duraderas del Gobierno de Estados Unidos por parte de un agente extranjero", manifestó el fiscal general de EE.UU., Merrick B. Garland.
Rocha es recordado en Bolivia porque cuatro días antes de las elecciones generales de 2002, pidió a los bolivianos que no voten por Morales, en la que fue su primera postulación a la Presidencia.
"Quiero recordarle al electorado boliviano que si elige a los que quieren que Bolivia vuelva a ser un exportador de cocaína ese resultado pondrá en peligro el futuro de la ayuda de los Estados Unidos a Bolivia", declaró entonces Rocha.
Estos dichos causaron indignación en el país altiplánico y Morales, que aparecía como tercero en las encuestas, terminó segundo en la votación con un margen muy estrecho con su inmediato perseguidor, Manfred Reyes Villa, quien en su momento consideró que el exdiplomático fue causante del ascenso del líder cocalero.
El mismo Morales ha ironizado varias veces con que Rocha fue su "mejor jefe de campaña".
En un mensaje en la red social X (antes Twitter), el expresidente boliviano Jorge Tuto Quiroga (2001-2002) señaló que a Morales, a quien llamó "mitómano irredimible", "alguna vez -generalmente cuando descalifica- se le escapan verdades".