El 2023 se registraron 6.962 nacimientos en la región, disminuyen 5.7% en relación al 2022
NATALIDAD. Cifra es similar a la del año 2021, cuando hubo 6.752. Priorizar proyectos personales y profesionales, mayor acceso a métodos anticonceptivos y costos asociados, entre los motivos.
"He postergado la decisión de ser padre por proyectos personales, como viajar. Si hubiese podido hacerlo antes, habría sido genial. Feliz ya habría tenido hijos, pero me costó encontrar un trabajo estable que me asegurara tener una estabilidad económica para asumir esta responsabilidad".
Es la reflexión que realiza Javier Calderón (34 años), quien junto a su pareja han decidido postergar la decisión de ser padres y enfocarse por ahora en sus proyectos personales.
Un motivo que se repite entre quienes aun no tienen hijos o bien descartan ser padres, lo que de algún modo, se ha reflejado también en la disminución en el número de nacimientos en la región.
De acuerdo a cifras entregadas por el Registro Civil e Identificación, el año 2023 se registraron 6.962 inscripciones de nacimientos en la región de Antofagasta, una cifra que significó una baja de 422 nacidos (5.7%) respecto al año 2022, cuando hubo 7.384 nacimientos inscritos.
El número de nacidos el año 2022 (7.384) significó una cifra similar a la registrada el año 2020 en el primer año de pandemia, cuando hubo 7.395 nacimientos.
Mientras que el año 2021 también se observó una disminución respecto al primer año de pandemia, al inscribirse 6.752 nacimientos, vale decir, 643 nacimientos menos.
Análisis
Una disminución en el número de nacimientos que para expertos está asociada a la priorización del desarrollo profesional y personal, pero también a los altos costos asociados que significan tener hijos.
El doctor en Sociología de la UA, Pablo Camus, indicó que al revisar cualquier plataforma de caracterización socio demográfica, se puede observar que más de la mitad de los países del mundo han bajado su tasa de natalidad de forma "dramática".
En este contexto, indicó, que Chile no es la excepción, pues alcanza un promedio de 1.7 hijos por mujer, lo que puede deberse a algunos factores claves.
"Creo que hoy los roles se han equiparado, el mundo productivo y económico demanda tanto a mujeres como hombres. Yo diría que no por igual, aun nos falta en eso, pero el interés y las trayectorias profesionales tanto de hombres como mujeres sí son similares. Y eso, creo que es fundamental para tomar decisiones respecto de la planificación familiar", indicó.
Camus agregó que "si a esto, se suma que existe mayor acceso a la anticoncepción y hay un mayor nivel de educación y competitividad por el trabajo en términos de equidad de género. Creo que eso explica la baja tasa de natalidad".
El profesor titular del departamento de Economía de la UCN, Dusan Paredes, señaló que una de las grandes condicionantes de la tasa de natalidad "curiosamente" se debe a variables económicas.
"Las personas están conscientes de los costos que implica el nacimiento de hijos y por lo tanto corrigen su perspectiva de natalidad por la propia situación económica. Nosotros vemos hoy en Chile que los costos de educar a los hijos son extremadamente altos y claramente eso desincentiva la tasa de nacimientos", declaró.
Asimismo, Paredes menciona como ejemplo, que durante la gran depresión económica en Estados Unidos del año 1929, las tasas de natalidad cayeron considerablemente. Sin embargo, los que sí nacieron - al ser menos- tuvieron mejor acceso a salud y educación, y de acuerdo a distintos estudios fue una generación de profesionales muy exitosa, lo que les permitió incrementar sus salarios y eso llevó a que la tasa de natalidad nuevamente subiera.
"Es decir, sé que puede ser preocupante el dato, pero la economía tiene esa gracia que se autorregula. Y por lo tanto, curiosamente la baja en la tasa de natalidad de hoy puede ser justamente el punta piel inicial de un repunte de la tasa de natalidad en el mediano plazo", indicó.
La presidenta del Colegio de Matronas y Matrones de la Región de Antofagasta, Sandra Zenis, señaló que la baja de recién nacidos en la región, a nivel nacional y mundial es un indicador que muestran países desarrollados, en los cuales la población tiende a tener menos hijos, y por ende, a envejecer, lo que puede observarse en Estados Unidos y Europa.
"La mujer y el hombre que desean tener familia lo postergan para darle importancia a su desarrollo profesional y laboral. También se consideran los costos que significa tener un hijo y la incertidumbre por muchas veces inestabilidades laborales. Pueden haber también intereses personales (...) como viajar o la compra de algún inmueble y quizás posteriormente pensar en prolongar su familia", declaró.
Zenis agrega que en la región, al haber mucha población flotante, probablemente esta disminución también responde a que las mujeres deciden tener a su hijo en la ciudad donde está su familia para así estar acompañadas.