Senado rechaza otorgar beneficios carcelarios a mayores y enfermos
PROPUESTA. La iniciativa obtuvo 21 votos a favor y 23 en contra. Gobierno lamentó que proyecto llegara a discutirse en sala. "Es improcedente", dijo el ministro Cordero.
La Sala del Senado rechazó ayer el proyecto de ley que buscaba que los presos mayores de 70 años o que tengan alguna enfermedad terminal pudieran cumplir su condena con medidas alternativas de cárcel.
La iniciativa, impulsada por Chile Vamos, buscaba regular el cumplimiento alternativo de penas privativas de libertad para que personas que padecen una enfermedad terminal, un menoscabo físico grave o que tengan una determinada edad, puedan completar las condenas en sus domicilios.
La decisión fue tomada con 21 votos a favor y 23 en contra, en una sesión marcada por protestas de familiares de detenidos desaparecidos. Esto impedirá que una iniciativa en el mismo sentido, que habría beneficiado a 776 personas, no se podrá presentar durante el plazo de un año.
"No a la impunidad"
Debido al posible beneficio a criminales de lesa humanidad, que en su mayoría superan los 70 años, el senador socialista Fidel Espinoza -cuyo padre fue asesinado durante el régimen de Pinochet-, destacó que "el Senado ha dicho que no a la impunidad, no a los violadores de derechos humanos, no a quienes cometieron crímenes de lesa humanidad, que atentaron contra la vida de miles de nuestros compatriotas de las maneras más atroces que haya conocido la historia de nuestro país".
Juan Ignacio Latorre (RD) advirtió que "la derecha no tenía los votos, sólo hizo un punto político; aprobaron en una mayoría circunstancial en la Comisión de Derechos Humanos pero en Sala, como requería quorum, no fue aprobado y eso lo valoro".
"Engaño"
Desde la oposición, aunque votó a favor, el senador UDI Iván Moreira cuestionó la estructura de la iniciativa y manifestó que "no se puede jugar y engañar a la gente, especialmente a aquellas personas que están en (la cárcel) Punta Peuco".
"Por sacar un aplauso fácil presentaron un proyecto que no tenía los votos, que técnica y jurídicamente dejaba abiertas las puertas para todos. Si queremos un proyecto de humanidad, tiene que ser focalizado en aquellas personas mayores que tienen enfermedades terminales", remarcó.
El legislador gremialista insistió que "lamentablemente, la irresponsabilidad y el engaño a los militares de parlamentarios del sector nos llevó a no poder aprobar este proyecto".
Gobierno satisfecho
Tras la votación, el ministro de Justicia, Luis Cordero, dijo haber quedado con "una sensación extraña, porque ayer en la discusión de la Sala se notaba el pesar, y creo que da cuenta de ciertas aproximaciones y fracturas que es necesario abordar razonablemente, y no del modo en que se hizo en este caso".
Cordero añadió que "la impresión que tenemos es que hay una disonancia o cierta discrepancia al interior de la oposición, entre aquellos que deciden promover un proyecto de aplicación general, y otros que más bien están preocupados de las situaciones de salud", puesto que "la manera en que estaba planteado este proyecto era en exceso amplia".
De hecho otro de los grandes cuestionamientos a la propuesta es que podía también beneficiar a violadores, narcotraficantes o asesinos. "Lamento haber llegado a una discusión en Sala de estas características. El Gobierno sigue teniendo la convicción política y jurídica de que un proyecto de estas características es completamente improcedente", dijo Cordero.