Cada cierto tiempo, los medios de comunicación, cumpliendo con su misión de informar, logran acceder a antecedentes de la investigación del caso Democracia Viva, los que una vez publicados no hacen más que aumentar el manto de duda sobre el real desconocimiento del tema del ministro Carlos Montes y de autoridades de La Moneda. Las declaraciones sobre que me "enteré por la prensa" o "sólo supe el mismo día que estalló" se vuelven poco creíbles, porque las conversaciones en chats, incluso documentos oficiales revelan que se llegó hasta lo más alto del ministerio y que también se informó a La Moneda.

Lo último publicado son conversaciones del día 7 de junio (9 días antes de que estallara el caso) en que la subsecretaria del Minvu, Tatiana Rojas, respondía vía mensajería de redes sociales, a Carlos Contreras, y le decía que la minuta preparada la iba a presentar al ministro para su visto bueno. Y en diálogos anteriores aseguraba que había puesto los antecedentes en conocimiento de La Moneda, y que agregaría la información enviada por el exseremi.

Esto último se intentó aclarar diciendo que nombrar a La Moneda sólo se utilizó como medida de presión para que se acelerara la entrega de datos requeridos. Algo que no se desprende, ni es posible interpretar en el intercambio de mensajes, más bien se lee que sí se evacuaron informes a la sede de Gobierno.

Carlos Contreras ha reiterado en sus declaraciones no judicializadas y judicializadas que siempre informó a sus superiores y de esa versión no se ha movido. Mientras que otros personeros del aparataje estatal se han desdicho en más de una oportunidad, como tratando de dejar explícito que el sistema se fraguó y se concretó en regiones, sin incidencia del poder central.

Teoría que se desploma cada vez que hay una nueva filtración del caso y fácilmente nos puede llevar a entender, como lo dijo el diputado J.M. Castro, que ha faltado transparencia desde el gobierno central.

Antofagasta como muchas ciudades del país necesitan revertir este modelo de ciudad en extensión, para lograr sustentabilidad ambiental, económica y cohesión social, además la urgencia de detener el calentamiento global y sus consecuencias. Construimos estos últimos años una ciudad de 30 km de largo y baja densidad, que crece solo en los extremos, negando la regeneración urbana, generando graves disfuncionalidades que se amplifican con su forma lineal. Tenemos una ciudad en deterioro, segregada, sin cohesión social, empobrecedora para los ciudadanos y de alto costo para el Estado, sin eficiencia energética, que privilegia planificar para el auto en vez de las personas, que funciona con movilidad motorizada, y más.

Por eso es inexplicable que un Ministerio que define las directrices del urbanismo del país planifique 9.000 viviendas en el extremo de la ciudad, al lado del exvertedero y estrechen los paseos de borde costero para que los camiones de concentrado de cobre circulen como en una carretera.

Necesitamos planificar para transformar y se puede lograr con una Planificación Disruptiva, mirando en abundancia, reinterpretando y reestructurando los recursos que tenemos. Referente global de la Planificación Disruptiva es el Museo Guggenheim Bilbao, que gatilló la regeneración urbanística, económica y social de la ciudad de Bilbao.

Un ejemplo de este tipo de planificación, generadora de transformaciones, es la Plataforma Logística Multimodal B 400, proyecto intercomunal, de 1300 has, que en un radio de 32 km. se relaciona con los dos puertos de la península de Mejillones y el aeropuerto que nos conectan al mundo, esta infraestructura da respuesta al encadenamiento productivo y comercio global, integrando la logística internacional y nacional con la actividad industrial de exportación, además da solución a la logística urbana.

Algunas transformaciones que se pueden dar: - Al integrar los dos puertos se especializa la carga, los cátodos de cobre por Antofagasta y el concentrado de cobre que contamina a Mejillones, al tener su puerto alejado de la población.- Zona portuaria eficiente al cambio climático, si en la bahía de San Jorge hay marejadas la bahía de Mejillones está en calma y viceversa.- Saltar de una economía minera extractiva a una industrial de exportación de maquinaria minera y de aparatos de energía renovable, demandados a escala global en la Región y participar en la cadena de valor global de la electromovilidad, al producir litio y cobre. -Se evita el ingreso de camiones a la ciudad, la relación ciudad puerto es exclusivamente ferroviaria -Regeneración urbana, entrega 140 has. del barrio industrial emplazado en el punto medio de la ciudad, con todas las condiciones para densificar, calles anchas, con dos vías estructurantes, colinda con el borde costero, que nos posibilita compactar y transformar la ciudad con los principios del urbanismo ecosistémico.