La renuncia de Carlos Sánchez, exsecretario ejecutivo de la Corporación Municipal de Desarrollo Social (CMDS) el 30 de agosto del 2022 dejó una serie de interrogantes. La situación se generó luego de un video en que el alcalde Jonathan Velásquez sostuvo que habían detectado una serie de irregularidades al interior de la Cmds. "Son $1.800 millones involucrados, pero podrían ser más. Informes falsos, facturas falsas y trabajos jamás realizados que una empresa cobra descaradamente llenando sus bolsillos a costa de la educación de las niñas y niños antofagastinos" señaló el edil.

A raíz de lo anterior, una de las primeras medidas adoptadas por Velásquez fue pedir la renuncia de Sánchez, a quien apuntó directamente. "Es necesario que en estos cargos tan importantes contemos con gente que sea capaz de fiscalizar rigurosamente toda la gestión a su cargo. En este sentido Carlos Sánchez lamentablemente no advirtió con anticipación lo que estaba ocurriendo (…) Es por eso que no seguirá como secretario ejecutivo de la Cmds y retomará sus funciones anteriores", indicó el alcalde.

La declaración generó profunda molestia en el exejecutivo quien sostuvo que la Corporación sí había tomado acciones sobre los hallazgos y que Velásquez estaba al tanto de ello. Lo que ha sido refrendado por diversos testimonios en tribunales.

El paso del tiempo y el avance de diversos juicios, han develado una enrevesada trama que involucraron el pago de facturas falsas por trabajos que nunca se realizaron al interior de la corporación y que han derivado en querellas por fraude al fisco, juicios civiles y laborales de las partes involucradas.

Del origen

De acuerdo con la querella presentada por la Cmds, los primeros indicios de irregularidades se advirtieron el 17 de junio del 2022, cuando Belguin Cisternas, entonces, jefa de administración y finanzas de la Cmds recibió un correo electrónico enviado por la firma Nueva Capital, factoring del Banco Itaú, que solicitaba información sobre el pago de la factura N° 1178 por cerca de $185 millones.

Tras una revisión, la Cmds determinó que la factura aludida no estaba registrada en el sistema contable de la corporación. La factura emitida por E y S Tecnologías SpA con fecha 22 de abril indicaba como descripción "Estado de pago N°1 (OCC:CC) Conservación Integral Escuela E-84 Las Américas, Antofagasta RBD 265-6, Código BIP 49997542-0".

Sin embargo, el proyecto de construcción no había sido adjudicado a E y S Tecnologías.

El RBD y código BIP indicado no correspondían ni a la escuela Las Américas ni tampoco a un proyecto relacionado con el sector municipal de la comuna.

Según los antecedentes recabados por la CMDS, en la escuela Las Américas sí se habían ejecutado obras, pero la empresa responsable había sido CAID S.A. y el proyecto había