Catastro califica a dos campamentos de la región con un nivel de violencia alto
URGENCIA. La zona mantiene tendencia al alza en "tomas" con 31 nuevos asentamientos desde 2022
El crecimiento explosivo de campamentos a lo largo del país también se evidencia en Antofagasta, con un aumento sostenido de este tipo de asentamientos ante una creciente demanda habitacional que no da tregua en esta zona del país.
La continua urgencia por hallar sitios donde instalar estas viviendas ha incrementado también su grado de vulnerabilidad ante amenazas como incendios, inundaciones y remociones en masa, entre otras. Una realidad que puede observarse a diario en Antofagasta, con instalaciones en zonas cada vez más escarpadas del borde cerro de la ciudad. A estos riesgos se agrega el impacto de la violencia ejercida al interior de algunos de estos asentamientos por bandas de delincuentes, como lo han evidenciado distintos operativos de fuerzas policiales en "tomas" de la ciudad. A este factor se suma el loteo de terrenos del fisco o de privados para venderlos a familias de alta vulnerabilidad social.
De acuerdo al Catastro Campamentos 2024 del Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu), de 1.091 campamentos registrados en 2022 a nivel país, en 2024 se contabilizan 1.432, con un alza de 341 nuevos asentamientos. Durante este mismo período el Minvu reporta un incremento de 31 campamentos nuevos en la región, con un aumento desde los 85 catastrados en 2022 a los actuales 116.
Judith Valenzuela, dirigenta chilena del campamento Villa Constancia 2, comenta que este asentamiento junto a Los Arenales, forman parte de las prioridades del gobierno para otorgar soluciones habitacionales. La organización de 15 comités en este campamento ha permitido mejoras, según expresa. "En el tema de la erradicación hay varias etapas que hay que ir viendo, porque tienen que haber empresas que se adjudiquen los proyectos. Porque aquí en el tema no es así llegar y erradicar. De hecho, estamos en el comienzo de algo que es primordial, vital, como son los proyectos de agua. Ya hay medidores generales. Tenemos el tema también con la empresa de electricidad, con la instalación de postes y medidores en cada casa, pero todavía no está la totalidad activado. En un tiempo más esperamos estar con la luz legal, como se dice", aclara Valenzuela, quien comenta que aún poseen conexiones irregulares.
Según esta dirigente, el objetivo de la comunidad consiste en soluciones habitacionales en el mismo lugar que habitan, mediante autoconstrucción con apoyo del Estado. Sin embargo, Valenzuela, reconoce que no todos podrían permanecer en el mismo lugar debido a viviendas asentadas en áreas de alto peligro, como zonas aluvionales.
Inseguridad
De acuerdo a un reciente catastro de la oficina de urbanismo Atisba, que incluye los 38 principales campamentos del país, cuatro se ubican en la comuna de Antofagasta. Este reporte clasifica también los niveles de seguridad en estas "tomas". Según el análisis de Atisba, los dos campamentos más grandes en la capital regional, corresponden a Aurora Esperanza-Quebrada Riquelme; que cuenta con un nivel de violencia alto, en sitios habitados por extranjeros, en 534 viviendas y con 1.868 habitantes; y Balmaceda Oriente, con un nivel de violencia también alto, habitado igualmente por extranjeros, con 270 viviendas y una población de 1.136 habitantes
La vocera del campamento Villa Constancia, ayer se había programado una reunión con Carabineros de la 3ra Comisaría de Antofagasta para abordar materias de seguridad. "La semana antes pasada hubo muertos acá en el campamento en Villa Constancia. Dos, un papá y un hijo", comenta.
Isidora García, directora social de Techo-Chile, plantea necesario incrementar las medidas de seguridad al interior de estos asentamientos ante casos de extrema violencia registrados en campamentos. "Hoy como país enfrentamos desafíos importantes en materia de seguridad. Esto claramente se materializa claramente en amenazas reales de inseguridad en los barrios. Los campamentos no son una excepción a esta realidad, siendo territorios que presentan un fuerte abandono de la institucionalidad pública, transformándose en terreno desprotegido del Estado. La delincuencia no es ajena a estos espacios y afecta directamente a quienes ahí residen y a comunidades vecinas. La falta de iluminación pública, planificación urbana y servicios urbanos contribuyen a esta amenaza, transformando estos espacios de vulnerabilidad en una oportunidad para grupos criminales que encuentran allí un lugar donde operar en impunidad (…) Se debe fortalecer el orden público, Carabineros y otros actores encargados de la seguridad deben ingresar a estos territorios, y ahí -donde hay aprovechamiento de los más vulnerables a través de venta de terrenos, delitos violentos y presencia de bandas criminales- no puede existir una gota de impunidad", asevera.