MOP rechaza concesionar Ruta 24 y condiciona vía estratégica para el Corredor Bioceánico
REGIÓN. El camino que une Tocopilla con Chuquicamata era crucial para potenciar el puerto de la comuna. Gobernador asegura que la concesión no es el único mecanismo para mejorar la ruta y que podría ser desarrollada por el MOP.
"Tocopilla tiene el calado suficiente para traer estos grandes barcos", decía el gobernador Ricardo Díaz en Paraguay, en el marco del V Foro del Corredor Bioceánico Capricornio, realizado en Paraguay, hace un mes. Para este desarrollo, Díaz anunció una inversión de US$ 40 millones, donde una de las iniciativas contemplaba actualizar los estándares de la ruta 24, que une Tocopilla con Chuquicamata, lo que también influiría en mejorar la vialidad y conexiones regionales para recibir el flujo de carga pesada que llegará una vez el corredor Bioceánico esté en pleno funcionamiento. Ello, además, en el entendido que actualmente la única ruta que podría utilizarse para el tránsito de camiones sería la autopista que une Calama con Antofagasta.
Para esto, la empresa privada Gocgroup Inversiones SpA presentó, en julio del 2023, un proyecto de concesión de esta ruta al Consejo de Concesiones, perteneciente al Ministerio de Obras Públicas (MOP). La inversión estimada era de USD$ 365 millones, con un plazo de concesión por 38 años, de los cuales tres serían para la construcción. Se proponía ampliar la pista simple a doble calzada, su conservación y un nuevo acceso hasta el puerto tocopillano. Ello en vista de viabilizar una de las rutas estratégica para el Corredor Bioceánico.
Entre los beneficios sociales, se apuntaba al ahorro de tiempo de viaje y la disminución de accidentes. En cuanto a innovación, se explicó que se destinarían 500 mil UF en el mejoramiento urbano de la Avenida Tocopilla, mejorando el borde costero y habilitando multicanchas y lugares de esparcimiento, entre otros.
Sin embargo, tras el análisis de los antecedentes, el Concejo de Concesiones desestimó recomendar la concesión solicitada. Ello de acuerdo al acta de la sesión del Consejo de Concesiones, celebrada el 23 de mayo del presente año.
"El Consejo decide no recomendar la Declaración de Interés Público de la Iniciativa Privada", aunque se reconoce que existe la necesidad de "avanzar en mejorar los estándares y conectividad del Corredor Bioceánico y la posibilidad de que el proyecto pueda ser ejecutado a través de un mecanismo distinto al del sistema de concesiones o desarrollado directamente por el Estado como una Iniciativa Pública".
Argumentos
En primera instancia, la entidad estableció que la iniciativa cumple con el mínimo exigido en cuanto a "rentabilidad social preliminar, existe concordancia del proyecto con los ejes productivos señalados en el Plan Regional de Ordenamiento Territorial (PROT) y existe contribución del proyecto al desarrollo territorial de su área de influencia al impulsar la materialización del Corredor Bioceánico".
No obstante, el Concejo detectó deficiencias en la rentabilidad social de la iniciativa.
El primero es que, aseguran, el proyecto requiere un alto nivel de subsidio, y que, "por otro lado, carece de originalidad en materia de infraestructura pública y tampoco representa un aporte innovador desde el punto de vista del diseño, la tecnología o gestión del proyecto, toda vez que la propuesta de innovación constituye solo un cúmulo de proyectos sin relación entre sí, lo que deja ver la inexistencia de una lógica, intención o sentido subyacente en la propuesta que otorgue un real valor agregado al proyecto que pueda ser catalogado de original o innovador".
Por último, el consejo concluyó que existe una contradicción, considerando que el proyecto es socialmente rentable, pero que se necesita un subsidio elevado, incluso con peajes relativamente altos.
Con esto, los expertos concordaron en dos teorías que explicarían las cifras. Primero, que "que no es el momento óptimo de desarrollo del proyecto, sino que debiese ser más a futuro, o que los beneficios sociales del proyecto están sobrestimados".
No es la única solución
Consultado, el gobernador Ricardo Díaz sobre el impacto que genera la no recomendación de la concesión de la ruta a las iniciativas que contemplan el fortalecimiento del Corredor Bioceánico en la zona, comenta que han sostenido conversaciones con el MOP sobre la necesidad de mejorar la vialidad regional. "Generar proyectos de concesiones no es la única solución", puntualizó Díaz.
En esa línea, argumenta que se puede construir la doble vía desde lo público. "Lo que tenemos que impulsar ahora es que haya un diseño, un proyecto que sea hecho por Obras Públicas y que no pague concesiones. Creo que esa también es una muy buena alternativa para desarrollar el Corredor".
Audiencia
Sin embargo, el senador Pedro Araya (PPD), comenta que solicitará una audiencia con la ministra de Obras Públicas y el director de Concesiones, "con el fin de que expliquen, en detalle los aspectos que impedirían la construcción de esta vía, desde Chuquicamata a Tocopilla".
El parlamentario recalca que la obra sería muy auspiciosa desde lo económico, considerando el corredor, y también desde lo social, "para el beneficio de los habitantes de la región, quienes merecemos y necesitamos, urgente, rutas de mejor estándar, tal como las que se levantan en la zona central del país".