"Si tus sueños no te asustan, no son lo suficientemente grandes"
Farid Char, psicólogo de profesión y astrónomo aficionado, suma casi 20 años de experiencia en divulgación, educación y observación astronómica, así como coautor de varias publicaciones relacionada con la materia.
Actualmente Farid trabaja en el Centro de Astronomía de la Universidad de Antofagasta y hace poco publicó un fotolibro astrofotográfico, en el que combina dos de sus grandes pasiones, la ciencia y el arte.
¿Cuál es su lugar favorito de Antofagasta?
-El Parque Japonés, por haber ido muchas veces allí en mi infancia y por su trasfondo cultural, ya que tengo un especial aprecio por la cultura asiática.
Si pudiera recomendar algún lugar de la región, ¿cuál sería?
-Creo que los géiseres del Tatio y sus alrededores siempre me han llamado la atención. Estar en un sitio a más de 4000 metros de altura, ver esas fumarolas imponentes en medio del desierto y con extremófilos capaces de soportar condiciones tan inhóspitas, se me hace un paisaje muy exótico, es como retroceder en el tiempo y recrear parte de lo que fue la Tierra primitiva.
¿Cuál fue su primer acercamiento con la astronomía?
-A inicios de los '90, mi papá me regaló un pequeño telescopio y me llevó a una exhibición ESO en el Teatro Municipal, en donde había maquetas con diseños preliminares del observatorio Paranal (entonces aún en construcción), junto a imágenes de objetos astronómicos tomadas por otros observatorios de la época, con mucho menor detalle que ahora. Todo eso me pareció fascinante, porque la gente comúnmente está preocupada de asuntos terrenales, de lo que tiene en frente, del día a día, pero el espacio de noche también amerita nuestra atención, porque es parte de la naturaleza. Haber observado por primera vez los cráteres de la Luna o los anillos de Saturno me hizo ver que hay cosas muy sorprendentes "allá arriba", lo cual me pareció intrigante y me motivó a seguir aprendiendo sobre el Universo.
¿Qué lo inspiró a convertirse en astrónomo amateur?
-Como alguien que se inició tan sólo inspirado por la curiosidad, de niño, viendo documentales, libros e imágenes del espacio (y sin duda afortunado por encontrarme tan cerca de los cielos oscuros del desierto de Atacama), puedo decir que más allá de todo ello, en algún momento noté un cambio de actitud respecto a mi afición inicial. Uno puede sentir que su afición es sólo un pasatiempo, o sentirlo como una pasión. Y es que en ese camino, casi sin darse cuenta, surgen cosas como la constancia, perseverancia, rigurosidad, seriedad y compromiso. Allí es cuando dejé de mirar el cielo y empecé a observarlo.
¿Qué le apasiona de su trabajo?
-He estado vinculado a la astronomía de varias formas y tenido oportunidad de involucrarme en ella desde el plano de la investigación, educación y divulgación. Creo que lo más apasionante a nivel laboral es poder contribuir a la ciencia (aunque sea a escala reducida) y comunicar sus avances, ya que permite sentirse parte del progreso científico y su diseminación en la sociedad, algo muy satisfactorio especialmente si uno no pudo formarse profesionalmente en astronomía. A nivel de divulgación, me gusta buscar formas nuevas de transmitir conceptos complejos de forma entendible, ya sea mediante una charla, analogía, astrofotografía u observación visual. A nivel más reciente he tenido un importante desafío en el observatorio ALMA, debiendo explicar al público qué es la radioastronomía y abordar conceptos más abstractos, ya que se trata del estudio de un tipo de radiación (ondas de radio) invisible al ojo humano.
¿Cuál ha sido su mayor descubrimiento en materia de astronomía?
-En 2014, tuve la posibilidad de colaborar en una investigación relacionada a Asteroides Cercanos a la Tierra, analizando observaciones tomadas por un telescopio de 2.5 m en España. Durante uno de esos análisis, tuve la fortuna de identificar un objeto que resultó ser no sólo un asteroide nuevo, sino también un cuasi-satélite de la Tierra (el cuarto conocido en ese momento), el cual recibió la denominación 2014 OL339. Si bien es mi único descubrimiento a la fecha, fue algo muy significativo a nivel personal.
¿Qué consejo le daría alguien que quiere convertirse en astrónomo?
-Creo que cualquier camino que se siga, sea a nivel profesional o no, será exitoso en tanto uno sea disciplinado. El camino de la astronomía profesional está inevitablemente acompañado de matemática y física, con su respectiva complejidad, pero se trata de desafíos abordables en tanto uno preserve cierta constancia y rigurosidad para alcanzar una meta, sin dejar cosas a medias, lo cual se consigue al tomar las metas en serio. Para alguien que opte por una carrera que puede conducir a trabajar en un observatorio (ej. varias ingenierías) o para quien sólo se proponga ser astrónomo amateur, el camino es el mismo: la disciplina propia es fundamental para sobreponerse a los obstáculos, corregir los errores y eventualmente alcanzar un gran logro, aún si eso te "asusta". Si tus sueños no te asustan, no son lo suficientemente grandes.
¿En qué proyecto o investigación está trabajando actualmente?
-Hace poco lancé un fotolibro astrofotográfico y ahora estoy generando ideas para financiar otros proyectos que combinan arte y ciencia mediante astrofotografía, algo en que me he especializado en los últimos años y que resulta muy útil para divulgar astronomía, ya que es una ciencia muy visual y los cielos del desierto son idóneos para retratarlos. También estoy realizando un tipo de observación con telescopio, al alcance de aficionados, que consiste en medir curvas de luz de tránsitos de exoplanetas, para subirlos a una base de datos online a modo de contribución.
¿Cuál es su próximo desafío?
-Estoy elaborando un libro de astronomía amateur, en el cual espero abordar las principales temáticas de interés para el aficionado, a través de contenidos especialmente orientados al hemisferio Sur. Pienso que será una contribución útil, considerando el potencial del norte de Chile en cuanto a actividades de astroturismo y educación astronómica en general, que en Chile no encuentra demasiados recursos bibliográficos (al menos para el hemisferio austral) ni una abundancia de ellos en español, ya que gran parte se encuentra en inglés. Espero poder lanzar esta iniciativa en el futuro próximo, lo cual anunciaré llegado el momento.