La pasión por impulsar la cultura en María Elena
Con solo 20 años, Elizabeth Vargas Pizarro, conoció a quien fue su pareja por más de 50 años, Jaime Guerra, Juntos trabajaron por fomentar la cultura en María Elena.
Para ella, esto es un gran motivo de orgullo, ya que siempre participó en diversas iniciativas como coros, clásicos navideños, radioteatro y teatro, siendo una permanente compañera para el comunicador y promotor de la cultura elenina.
"Jaime fue un hombre muy humilde, pero que entregó mucha cultura a María Elena. Fue un prócer de la cultura. Nosotros como pampinos trabajamos juntos mucho tiempo. Comenzamos como amigos y luego como pareja. Cuando trabajó en Antofagasta leyó noticias en Telenorte y fue el mejor", agregó.
Elizabeth Vargas nació el 15 de septiembre de 1947 en Tocopilla, pero su familia vivió en Coya Sur, hasta que ella tuvo nueve años, y luego llegaron a María Elena.
Su madre, María Gladys Pizarro Requena, y su padre Hernán Vargas Fajardo, formaron una familia muy unida. Su papá trabajó en la casa de fuerza de Coya Sur y luego lo trasladaron a la misma sección de la salitrera María Elena, donde estuvo por más de 40 años.
Vargas en su niñez estudió en la Escuela América, que después pasó a ser la Escuela Consolidada de 'María'. "Éramos todos una familia, siempre bien unidos, tanto María Elena como Coya Sur. Salíamos del colegio y luego tomábamos tecito, jugábamos a las escondidas, a la cuerda, al luche, a las rondas e inventábamos distintos juegos", señaló esta pampina.
En esos tiempos, Elizabeth Vargas vivía en la calle Tucapel Ponce. Recuerda que los adultos de su cuadra y de calle Edward jugaban a la challa (juego que constaba en tirarse agua y harina), después todos llenos de barro y mojados llegaban a la plaza.
Su padre tuvo que dejar de trabajar y su familia emigró a Antofagasta, donde vivió solo dos años y falleció. Su madre volvió a María Elena. "Nosotros siempre hemos sido una familia bien unida".
Conoció a Jaime Guerra Yáñez cuando tenía 25 años y él trabajaba en la Radio Coya. Venía de Tocopilla y lo invitó a participar a la Corporación Cultural.
Elizabeth Vargas dijo "me siento muy orgullosa de la labor de Jaime Guerra, por todo lo que hizo por la cultura de María Elena: dirigió elencos en obras de teatro, en la radio relataba cuentos que los pampinos contaba".
En 1975 hizo el himno de María Elena y luego el himno de Quillagua. La pareja fue fundadora del coro pampino, junto a la familia García. En un inicio eran cinco y después llegaron a ser más de 40 personas.
Para Vargas es importante destacar la gran historia de María Elena desde sus inicios hace casi 100 años.
"María Elena antes se llamaba Coya Norte. Su gran impulsor fue Elías Cappelen Smith, quien llega a este lugar con Marie Elene en 1926. El año siguiente falleció su esposa, y con acuerdo con los trabajadores, cambió el nombre de la oficina a María Elena", relató.