Tres recintos carcelarios de la región figuran en ranking de 10 penales con mayor ocupación
El fuerte aumento de la población penal en el país se ha alzado como una amenaza de "crisis penitenciaria" que no solo pone en riesgo a la seguridad de los internos, sino también la de los mismos recintos, según han reconocido autoridades de Gobierno y representantes del gremio de Gendarmería.
Según registros del Ministerio de Justicia de julio pasado, en el país se dispone de 42 mil plazas en el sistema penitenciario, en circunstancias que en aquel momento la población penal superaba ya las 57 mil. Sin embargo, hasta el mes pasado, de acuerdo a datos de la institución, esta ya se acercaba a los 60 mil (59.397)
Un panorama que se replica en la Región de Antofagasta, con penales que registran un elevado nivel de sobrepoblación. De acuerdo a datos de Gendarmería de Chile, en el listado de los 10 penales con mayor ocupación en el país figuran tres recintos penitenciarios de la región.
Este indicador lo encabeza incluso el Centro de Detención Preventiva (CDP) de Taltal (416% de uso de capacidad). Este ranking "Top 10" de uso de recintos según sus capacidades lo completan, en cuanto a centros penitenciarios de la región, el CDP de Tocopilla (284%) y CDP de Calama (242%).
Desde la Dirección Regional de Gendarmería de Antofagasta comentaron que ante el crecimiento exponencial de la población penal reviste una importancia vital el sistema de clasificación y segmentación de Gendarmería.
"Esto se aplica a toda persona que ingresa al sistema penitenciario chileno (por primera vez o reincidente), que incluye información de carácter personal, tipo de delito y otras variables determinantes para su posterior segmentación. Esto permite segmentar a esa persona en una dependencia acorde a su perfil criminógeno".
"Respecto a sobrepoblación, la densificación del Complejo Penitenciario de Antofagasta está orientada a dar respuesta a las necesidades regionales en materia de sobrepoblación, permitiendo ampliar la capacidad de dicho recinto en 190 nuevas plazas (actualmente su capacidad máxima es de 1.391 plazas). Esto considera la recuperación de celdas dañadas y la incorporación gradual de nuevas literas", agregaron.
En Antofagasta de una población penal privada de libertad conformada por 3.116 personas, 1.174 poseen procedencia extranjera, según datos de Gendarmería.
Internos extranjeros
Distintos análisis coinciden en que la falta de nueva infraestructura carcelaria, como también el fuerte aumento de internos extranjeros, surgen como factores que han incidido en la alta presión que enfrenta el sistema penitenciario.
La mayor proporción de reos foráneos hoy se centra en la macrozona norte, en un registro que encabeza Tarapacá (51%). Luego siguen las regiones de Antofagasta (38%) y Arica y Parinacota (35%).
Sobre esta realidad advierte Mario Benítez, Presidente de la Asociación Nacional de Oficiales Penitenciarios (Anop) a nivel país. "El aumento de la población penal ha sido sostenido y de manera significativa desde el año 2022. Hemos pasado a contar con más de ocho mil internos extranjeros. Hay cifras altísimas, por ejemplo, en el norte del país donde en algunos recintos representan más del 50% de la población. Sobre los internos extranjeros hemos recalcado de forma constante que no conocemos sus antecedentes policiales ni penales".
"Por lo anterior, se dificulta tener una buena clasificación y segmentación de esta población, porque para nuestro sistema son internos primerizos. Sin embargo, muchas veces estos son delincuentes con un alto prontuario y compromiso delictual, ligados incluso al crimen organizado y a bandas criminales transnacionales. Hoy se hace necesario enviar a oficiales y personal de Gendarmería como agregados a distintos países para una buena coordinación de la información. Eso es lo más grave", dice Benítez, sobre una dificultad que presentan principalmente los reos de nacionalidad venezolana, ante la hoy nula cooperación para estos fines del gobierno de ese país.
Benítez, en tanto, define como una "tensa calma" el panorama carcelario ante el aumento sostenido de población penal extranjera. "Este interno extranjero poco a poco ha ido ganando espacio dentro de las cárceles chilenas. No podemos decir que dominen, pero sí su presencia es importante, y en algunos centros penitenciarios del norte su aumento ha sido significativo y ya en algunos son mayoría dentro de la población penal", advierte.