Agencia AP

Cuando Lady Gaga entró en un bar de Nueva York que frecuentaba hace cinco años, los recuerdos la golpearon: en ese entonces, escribía canciones allí, sintiéndose perdida y desconectada de sí misma. Pero esta vez fue diferente. Sentada ahí sintió paz y rejuvenecimiento, como en la adolescencia que pasó garabateando letras en servilletas.

En los últimos años, redescubrió su pasión por la música al alejarse de los focos, cortar falsas amistades, cambiar el protagonismo por noches tranquilas en casa y rodearse de personas en que confía. Esa transformación fue el alma de su nuevo álbum, "Mayhem", publicado ayer.

"Me recuperé a mí misma como artista", dijo Gaga, ganadora de 14 Grammy y un Oscar, y quien regresó a sus oscuras raíces pop en este álbum de 14 canciones y que sigue a "Harlequin", del año pasado, un álbum inspirado en el jazz para la película "Joker: Folie à Deux", que se estancó en el 20 del Billboard 200.

Los sencillos de "Mayhem" han sido bien recibidos, incluyendo "Disease", "Abracadabra" y "Die With a Smile", una colaboración con Bruno Mars, que pasó cinco semanas en la lista Hot 100 de Billboard en el número 1 y ganó un Grammy a la mejor interpretación pop de dúo/grupo este mes.

Gaga atribuyó su renovado impulso creativo a un viaje de autodescubrimiento que la empoderó.

"Construí una rutina en mi vida diaria en torno a la música todo el tiempo, y no en torno a la autopromoción", dijo Gaga, de 38 años, quien fue productora y coproductora ejecutiva con su prometido Michael Polansky, de 41 años, en "Mayhem". "Cuando mi vida giraba en torno a la autopromoción, creo que perdí gran parte de mi pasión. Cuando mi vida giraba en torno a mi familia, mi pareja y mi música, me devolvió esa realidad".

Gaga ahondó en cómo le costó recuperar su pasión. Mientras lanzaba sus primeros éxitos como "Just Dance" y "Poker Face", notó que los críticos minimizaban su papel, dando más crédito a los productores y estilistas. Con "Mayhem", pretendía demostrar que su talento era la verdadera fuerza impulsora detrás de su ascenso. Impulsada por los escépticos, la cantante está decidida a demostrar que es artífice de su éxito, no solo otra creación de la industria.

"Trataron de calificarme y cuantificarme", dijo. "Muy a menudo, como mujer en la música, dicen que fueron otras personas. Que eres un producto, como si estuvieras hecha. Algo que era realmente importante para mí en esto era realmente tomar de mis propios inventos de mí misma".

Cuando comenzó a grabar su nuevo álbum, se centró en crear el tipo de melodías pop oscuras que definieron los inicios de su carrera, combinándolas con letras que hablaban en código. Dijo que todo volvió de forma natural, lo que le dio la seguridad de que estaba en el camino correcto para adueñarse plenamente de su identidad como artista y no como un personaje inventado

"Esta fue una forma de sentir que no lo era. Que era mi verdadero yo", dijo. "Yo fui la creadora. Este era mi trabajo. Simplemente, no era un personaje que estaba interpretando. Fue algo que yo hice".

Al principio de su carrera, la fama llegó con un precio que Gaga no estaba dispuesta a pagar. Se sentía aislada en un entorno que priorizaba la competencia sobre la creatividad, pero comenzó a notar un cambio a medida que sus ventas subían más allá de los primeros 10 millones de discos.

Pero se dio cuenta de que permanecer en esa energía sofocaría su creatividad, sabiendo que era hora de liberarse. "Perdí lo que le enseñaría a mi hijo, que es sentarse a solas con tus pensamientos y escribir un poema", dijo. "Siéntate solo y escribe una canción. Sólo tienes que poner el trabajo duro y maestría a la antigua en lo que crees. Perdí eso mucho tiempo".

Gaga presionó para reiniciar. Cortó relaciones agotadoras y construyó una familia con Michael Polansky y sus perros. Esto ayudó a Gaga a canalizar su energía de nuevo en su arte.

"Este es el primer día que hago entrevistas sin maquillaje, y es agradable", dijo. "Solo tengo la oportunidad de compartir con ustedes mi experiencia con la música, y no me siento presionada a actuar para ustedes de ninguna otra manera que no sea como artista femenina".

Gaga estará esta noche en el programa "Saturday Night Live", donde será la invitada musical y anfitriona. Pero su versatilidad podría brillar aún más en los sketches de comedia del programa.

"Tengo la oportunidad de trabajar en todos los diferentes tipos de arte que amo tanto", dijo Gaga, quien hará su segunda aparición como presentadora de 'SNL' y la quinta como invitada musical. La primera vez que apareció como anfitriona e invitada musical fue en el 2013.

"Hacer 'SNL' se trata de trabajo duro", dijo. "Es un trabajo de amor para el público el sábado por la noche porque queremos que todos se sientan felices en casa".

Tengo la triste misión de comunicarles que este martes 04 de marzo, a las 22,28 horas, nuestro profesor historia, don Bernardo Matejasevic, me informó que falleció mi compañero de curso en la carrera de Periodismo de la Universidad del Norte, Juan Godoy.

El año pasado le tocó a nuestra Dora Chipoco, como el 73 a nuestro compañero Luis Alanís.

Con Juan y Sergio Pallomari, hicimos nuestra memoria de título, que aprobamos con distinción en abril de 1976: "Periodismo Científico, factor acelerador del Pacto de Integración Subregional Andino". Así que soy el único sobreviviente de esa triada.

Mary, su viuda contó que Juan, de 74 años, murió como quería: Un ataque fulminante lo derrumbó.

Lo conocí en 1972 y fue un ameno compañero, organizaba y jugábamos apasionados partidos de baby en la cancha de la Norte, donde teníamos de galleta a Alejandro Guillier de Sociología.

Tenía un programa radial deportivo en Radio Antofagasta, donde una vez me invitó a hacer comentarios sobre Eddy Merckx, campeón mundial de ciclismo y muy popular en los años 70.

Juan fue nombrado alumno ayudante de la Hemeroteca de la carrera de periodismo y logró que me designaran encargado de nuestra sala de redacción, que bautizamos como Taller de Redacción Andrés Sabella en un acto que bendijo el padre Deak y donde el vate hizo un flamante discurso en presencia del vicerrector.

De vez en cuando junto a los profesores Sergio Prenafeta, Juan Pablo Cárdenas y otros alumnos, nos reunimos a conversar y a comer una suculenta pichanga en un bar de trabajadores del puerto.

Nos encontramos en los 90 y con Juan y el Pallo nos fuimos a comer locos con vino blanco, que él mismo pagó, como parte del compromiso que suscribimos en 1976, al hacer nuestra memoria.

Esa noche salimos a caminar por las calles antofagastinas, hasta que cerraron todos los bares que él conocía y donde se ponía a cantar, hasta que cada uno tuvo que irse a su casa.

En 1975 siendo Mario Cortés, director de El Mercurio y Alfonso Castagneto, director de la Estrella de Antofagasta, hicimos nuestra práctica profesional en donde conocimos a destacados periodistas como Arcadio Castillo; en Deportes, Homero Ávila; en Crónica, Moisés Escobar, ambos Premios Nacionales de Periodismo, el reportero gráfico Rolando Gómez Smith.

En febrero de 1976, con Mary, su cuñado y su primer hijo, en una fiel Citroneta, viajamos desde Antofagasta, cruzando un desierto lleno de densa camanchaca, hasta Los Andes donde un pariente, nos carneó un chancho y que regamos con buen tinto.

Luego llegamos a la casa de su madre, que nos recibió con un huesillo gigante con mote, el más rico que me he comido en mi vida.

Sergio Montivero me cuenta que Juan estuvo de corresponsal de El Mercurio y en la Intendencia de Antofagasta. Ramón Reyes agrega que terminó en el Ferrocarril de Antofagasta a Bolivia.

Hoy propongo hacer un orza por Juan Godoy, que está ¡Presente, Ahora y Siempre!

Rodrigo Cerda Iturriaga, Periodista

Linterna de Papel